Una picadora de carne gigante amarilla con un cartel que dice “Financiado por el FMI” es sostenido por estudiantes del Instituto de Enseñanza Superior Lola Mora con pañuelos rojos colgando del cuello con la estampa “Luchemos por la educación. No al 29x1”. Más de cinco cuadras colmadas de personas marcharon en contra del proyecto de Cambiemos para crear la Universidad de la Ciudad de Buenos Aires (UniCABA), que pretenden reemplace a los 29 Institutos de Formación Docente (IFD). Docentes, alumnos, sindicatos y centros de estudiantes de todos los niveles educativos partieron del Ministerio de Educación de la Nación pasadas las seis de la tarde en dirección a la Legislatura porteña.
Patricia Simeone, presidenta del Consejo de Educación Superior Estatal (Cesge) y rectora del Instituto Joaquín V. González, calificó el proyecto de “un sinsentido”. “La UniCABA está presentada como una universidad jurisdiccional, con lo cual tiene que hacer un proceso de cuatro o cinco años para que la CONEAU le otorgue la validez nacional al título”, aseguró Simeone y agregó que los profesorados ya cuentan con dicha validez, además de reconocimiento nacional e internacional. También denunció que el proyecto causaría un recorte antidemocrático, ya que el rector de la UniCABA sería designado a dedo por el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. Asimismo, Simeone señaló que los docentes nunca fueron consultados para la redacción del proyecto y que más que una universidad, necesitan “presupuesto, mejorar la infraestructura y becas universales para los estudiantes”.
Para los docentes, la creación de la UniCABA implicaría la pérdida de puestos de trabajo ya unificaría todas las carreras. Tampoco están contempladas las especializaciones que se dictan en los IFD, como es el caso de los traductorados. “El proyecto es muy vago, no queda claro qué va a pasar con las carreras ni los planes docentes. A los traductorados ni los mencionan”, dijo Daniela Campanelli, representante del Centro de Estudiantes Terciarios del Lenguas Vivas. Agregó que contener a todas las carreras en un solo edificio generaría una baja en la matrícula porque “no es lo mismo una persona que tiene que viajar dos horas para llegar a la universidad, como viajar media hora, que es lo que puede llegar a suceder en este momento”.
El proyecto se presentó en noviembre de 2017 y ahora se trata en comisión en la Legislatura. “Lo que está ocurriendo es una farsa de debate”, denunció Gabriel Solano, legislador del Frente de Izquierda e integrante de la Comisión de Educación. “Ahora estamos en una especie de impasse, no se ha reunido la Comisión en las últimas semanas y, como resultado del rechazo de los profesorados, se está haciendo una maniobra que consiste en querer aprobar la UniCABA diciendo que podría coexistir con los institutos. Sería una aniquilación de los institutos, pero más lentamente”, afirmó Solano, ya que les estaría quitando presupuesto.
“Esta propuesta es nefasta, muy destructiva. No vamos a aceptar ni la destrucción de los profesorados ni la coexistencia con la UniCABA porque eso apunta a una desfinanciación y el objetivo es la precarización laboral”, sostuvo Ana Lojo, docente y egresada del “Joaquín V. González”.
Los sindicatos que convocaron a la movilización fueron Ademys, UTE, AGD y Feduba. Guillermo Parodi, secretario adjunto de UTE, dijo: “Es un proyecto inconsulto, que no tuvo en cuenta a la comunidad educativa. Algunos de los profesorados de la Ciudad de Buenos Aires tienen una trayectoria de más de cien años y se tira por la borda toda esa experiencia para crear una universidad que no sería mejor que los profesorados”.
La marcha avanzó por la calle entre cantos que reclamaban que nadie sea indiferente, que “nos cierran los terciarios en la cara de la gente”. Desde los vehículos, bocinazos en apoyo acompañaban el pedido de “No a la UniCABA”.