El Ministerio de Trabajo dictó ayer la conciliación obligatoria en el conflicto entablado entre la fábrica de cromados Metalkrom y la Unión Obrera Metalúrgica. Esto significó la reincorporación de cinco trabajadores que habían sido despedidos la semana pasada, en el marco de la complicada situación económica que atraviesa esta empresa rosarina, agravada por el encarecimiento de la tarifa de energía eléctrica y un fallo judicial adverso al recurso de amparo con el que había pedido suprimir tales aumentos.
Todo volverá a foja cero desde hoy en el establecimiento de Pasco al 1200. La pyme metalúrgica volverá a tomar a los obreros que había despedido la semana pasada, y la UOM dejó sin efecto las medidas de fuerza cuya dirigencia había anticipado que pondría en práctica apenas la patronal confirmó su decisión de encarar "una reestructuración" que empezó por despidos de personal. El paraguas que impuso la cartera laboral regirá hasta el 31 de mayo.
Metalkrom había dispuesto las cinco cesantías luego de que la jueza en lo Civil y Comercial nº 5, Lucrecia Mantello, rechazara un recurso de amparo que pedía obligar a la Empresa Provincial de la Energía ‑a la que le debe alrededor de 3 millones de pesos‑ a retrotraerle el precio de su tarifa de energía a noviembre de 2016. El argumento era la imposibilidad de afrontar el pago de ese servicio, sobre todo cuando una de las últimas facturas era por 185.000 pesos. La jueza declaró inadmisible ese planteo y le dio la razón a la EPE.
Metalkrom es una pyme familiar con 50 años de trayectoria. Emplea unos 30 operarios que producen cromados de piezas metálicas y barras cromadas para una cartera de 900 clientes en distintas provincias. Pero desde que el gobierno nacional abrió la importación, ese mercado de la metalúrgica rosarina se redujo a la mitad.
Lisandro Dippe, dueño de Metalkrom, señaló: "No hay un solo culpable, pero lo más influyente es la política económica nacional ‑agregó el empresario‑ porque tenemos insumos en dólares, porque la apertura de importación habilitó el ingreso de barras cromadas de países con energía subsidiada como Brasil, también desde Rumania y Turquía. Este es un rubro electrodependiente. Mi estructura de costos me impide competir con eso. La facturación cayó a la mitad desde entonces. Y golpeé varias puertas en el gobierno nacional y me confirmaron que no tienen ninguna herramienta para salvar a mi pyme", describió hace algunos días el titular de Metalkrom.
El abogado de la seccional Rosario de la UOM, Pablo Cerra, explicó a Rosario 12 la posición del sindicato ante la actitud empresaria. "Nosotros los acompañamos cuando presentaron el recurso de amparo, pero nos molestó cómo obraron luego, fue un acto inmoral: despidieron a los trabajadores, y al otro día presentaron el concurso preventivo de acreedores, lo abrocharon con los despidos a sabiendas de que eso vulnera el derecho de indemnización, porque se sabe que en esa situación el trabajador termina cobrando varios años después", analizó el letrado.
Ahora el plazo corre hasta fin de mes. "En ese tiempo trataremos de buscar soluciones para los trabajadores", dijo Cerra, que se mantiene en contacto con distintas áreas de gobierno ya desde crisis anteriores como la de Mefro Wheels, por ejemplo. No obstante, en UOM añoran la sintonía fina que encontraban en el ex ministro de Producción, Luis Contigiani, y el tándem que conformaba con el ministro de Trabajo, Julio Genesini. No es el mismo entendimiento con la actual titular de aquel área, la socialista Alicia Ciciliani.
Cerra reconoció que Metalkrom, al desarrollar una actividad electrodependiente, sufre en demasía el encarecimiento de la tarifa eléctrica. "Eso es fundamentalmente lo que la está matando. No es mentira. Pero fue una inmoralidad lo que hicieron luego", despreció el abogado.
"Hacía rato que le decíamos (al dueño) que presentara un concurso porque su panorama era para eso. Pero si despidió y después presentó el concurso, los quiso arrastrar adentro a los trabajadores", razonó.