El británico Lewis Hamilton completó ayer un fin de semana perfecto al ganar el Gran Premio de España de Fórmula 1 por delante de su compañero de equipo, el finlandés Valtteri Bottas,y consolidarse así como líder del campeonato. 

En el circuito de Montmeló, el británico dominó de principio a fin y nunca tuvo en riesgo una victoria que le permitió escaparse en la cima del torneo porque el alemán Sebastian Vettel debió conformarse con el cuarto lugar con su Ferrari, detrás del Red Bull del holandés Max Verstappen. La jornada en Barcelona resultó fatídica para la escudería italiana, ya que el finlandés Kimi Raikkonen debió abandonar por problemas mecánicos. El australiano Daniel Ricciardo, con el otro Red Bull, finalizó en la quinta posición, justo delante del Haas del danés Kevin Magnussen.

Los pilotos locales Carlos Sainz (Renault) y Fernando Alonso (McLaren) quedaron séptimo y octavo, mientras que el mexicano Sergio “Checo” Pérez (Force India) y el monegasco Charles Leclerc (Sauber) completaron los diez primeros puestos.

Cuando se largó la prueba, Vettel consiguió adelantarse a Bottas en la primera curva, pero un accidente que involucró al francés Romain Grosjean, el alemán Nico Hülkenberg y el francés Pierre Gasly obligó pronto a la entrada del auto de seguridad. Con la pista despejada, Hamilton comenzó a tomar distancias de Vettel, que apenas podía contener a un Bottas desatado. Por eso, el alemán hizo rápido su detención en boxes y, pese a que el finlandés lo siguió un par de giros después, por culpa de una parada lenta volvió al circuito detrás del piloto de Ferrari. A esa altura, Raikkonen, con la otra Ferrari, sentía la presión de los Red Bull de Verstappen y Ricciardo, que se le adelantaron en vueltas sucesivas, hasta que el finlandés finalmente abandonó con problemas en su auto.

La incógnita de la carrera pasaba por el clima, amenazante de lluvia. Los Red Bull apostaron a permanecer en pista, pero volvieron al cuarto y quinto lugar cuando se detuvieron por primera vez. Hamilton, cómodo en la cima, ya tenía una ventaja de diez segundos sobre Vettel, que seguía con Bottas en los retrovisores.

Ferrari buscó un último manotazo estratégico para intentar cambiar la historia, pero la segunda detención de Vettel no tuvo el efecto esperado: no sólo los Mercedes siguieron en pista, sino que el alemán regresó por detrás de Verstappen y se cayó así de la zona de podio. Por más que lo intentó, el cuatro veces campeón del mundo se tuvo que mantener detrás del holandés, dejando buenos puntos en el camino. 

Con cinco fechas disputadas, Hamilton lidera el campeonato con 95 puntos, seguido por Vettel con 78, al tiempo que Bottas desplazó del tercer puesto a Raikkonen con 58. En el torneo de constructores, Mercedes aprovechó el primer 1-2 de la temporada para colocarse líder con 143 unidades contra las 126 de Ferrari.