El ex vicepresidente Amado Boudou y su amigo José María Núñez Carmona hablaron ayer en una de las últimas jornadas del juicio por el caso Ciccone. “Los testigos que hemos escuchado en estos meses me dieron la razón, en especial mi supuesto testaferro, Alejandro Vandenbroele. Acá quedó en claro, como siempre dije, que ni nos conocíamos. Eso lo reconoció él mismo. Y también quedó en claro que no me quedé con nada, sino que quien estaba detrás de la compra de la calcográfica era Raúl Moneta”, sostuvo el ex vicepresidente en su declaración. En paralelo, Núñez Carmona contó que trabajaba para Moneta en armar negocios y que fue Vandenbroele el que armó la sociedad The Old Fund con financiamiento de Moneta. “Podrán ver en toda la historia de mi relación con Amado Boudou que nunca hicimos negocios juntos”. Así, Núñez Carmona reiteró que Boudou no tuvo que ver con la propiedad o las acciones ni con The Old Fund ni con Ciccone.
Toda la causa de la imprenta gira alrededor de la forma en la que la empresa fue sacada de la quiebra, el papel de The Old Fund, que se quedó con Ciccone, y los contratos posteriores para imprimir billetes. La hipótesis de la acusación era que fue Boudou el que consiguió el plan de la AFIP para sacar a Ciccone de la quiebra, que luego el ex vicepresidente se quedó con el 70 por ciento de las acciones a través de The Old Fund y que también fue Boudou el que consiguió los contratos para imprimir billetes.
Ayer, tanto Boudou como Núñez Carmona respondieron a esas acusaciones.
- “Los testigos confirmaron acá –señaló el entonces ministro de Economía– que no le dije a la AFIP que permitiera el levantamiento de la quiebra sino que haga lo que tenía que hacer. Yo no le mandé una nota a la AFIP, sino que contesté una consulta.” Boudou hasta leyó el Diccionario de la Real Academia Española para ratificar que era la propia AFIP la que debía tomar la decisión y reiteró que no tenía facultades ni firma para resolver el tema impositivo de Ciccone.
- También Boudou insistió en que nunca se vio ni con Vandenbroele ni con los hermanos Ciccone. Explicó, con un mapa, que la reunión mencionada con los dueños de la imprenta no existió porque dieron como ubicación dos lugares distintos. “Es una mentira. Jamás hablé con los Ciccone”, reiteró.
- Núñez Carmona sostuvo que conoció a Moneta en la Casa Rosada y que armó negocios con él. Intentaron comprar Telefé, Canal 10 de Mar del Plata y luego fue la operación Ciccone. El Nariga, como le dicen a Núñez Carmona, señaló que no conoció ni a Jorge Brito padre ni a Jorge Brito hijo, y que no fue al casamiento de este último, como se dijo. Afirmó que todo lo armado en torno a la imprenta fue con Moneta, aunque no podía descartar que Moneta haya arreglado el financiamiento y el manejo de la imprenta con Brito.
- Vandenbroele había afirmado que Núñez Carmona consultaba todo con Boudou. “Es mentira. Yo nunca le dije con quién consultaba las cosas. Las consultaba con Moneta”, declaró ayer.
- Boudou también reiteró que no tenía el menor poder en el Banco Central, que es el que estaba por contratar a la ex Ciccone para fabricar billetes.
- El abogado de Moneta, Alfredo Petracci, declaró que efectivamente en nombre del empresario reclamó que le devolvieran dinero cuando la imprenta se estatizó. Eso demostraría que Moneta fue el propietario de la ex Ciccone.
- Núñez Carmona detalló toda su historia empresaria y adujo que nunca hizo negocios con Boudou. Sólo tuvieron en común una inmobiliaria sin actividad y un terreno en el que iban a construir y no lo hicieron.
- Núñez Carmona también cuestionó a Vandenbroele como arrepentido y señaló que el gobierno de Cambiemos le paga de manera oculta.
A fines de este mes se producirá el comienzo de los alegatos. A primera vista da la impresión de que la principal acusación contra Boudou está caída: no se presentó ninguna prueba ni indicio de que el ex vicepresidente se haya quedado con la imprenta, como planteó la acusación inicial.