Los precios están acusando recibo de la escalada del dólar. En los supermercados, un amplio abanico de empresas proveedores envió nuevas listas de precios con subas de entre el 8 y el 10 por ciento y la aplicación en las góndolas está en proceso de negociación entre gerentes de compra. Pymes metalúrgicas trasladaron un 10 por ciento de aumento minorista ante la suba del 16 por ciento de los insumos, en línea con la evolución del dólar. En la construcción, los precios de los insumos también están dolarizados e incluso se detectaron casos en los que las empresas venden a plazo calculando la cotización de la divisa a 26 pesos. En medio de este panorama, el Gobierno aseguró que la inflación de mayo estará por debajo de la marca de abril, que fue del 2,7 por ciento según el Indec. Las pymes advierten sobre el impacto en el recorte de la cadena de pagos.
Pasó el supervencimiento de las Lebac y el dólar terminó ayer a 24,79 pesos, mostrando un alto nivel de volatilidad durante la jornada. Incluso si la cotización de la divisa se mantuviera, los precios en la economía nacional se movieron por medio de los bienes finales importados, componentes provenientes del exterior, bienes exportables o componentes de bienes exportables.
Un caso ejemplar de impacto interno de la devaluación se verificó en estos días con la harina. El trigo cotiza en dólares porque es un bien exportable, lo cual impacta de lleno en el precio de la bolsa de harina. La suba del dólar junto a la escasez de trigo por retención de la cosecha afectó a los precios internos. “En abril, la bolsa de harina estaba a 400 pesos y hoy cotiza 600 pesos según el molino, es una suba del 50 por ciento. Esto se explica por el dólar y porque los molinos no tienen trigo porque los del campo están especulando”, explicó a este diario Emilio Majori, de la Federación Panaderil de la provincia de Buenos Aires. El kilo de pan subió en estos días un 25 por ciento, agregó el dirigente.
Desde una de las grandes cadenas de supermercados comentaron a este diario que “hubo una fuerte oleada de subas de productos producidos en base a la harina, como pastas, panificados y galletitas”. Los incrementos en productos masivos, sin embargo, fueron generalizados. Un insumo típico de los productos de consumo masivo son los envases plásticos y de aluminio, cuya cotización está atada al dólar. Hay fuerte presión de la industria para incrementar los precios entre un 8 y un 10 por ciento. “Se está negociando qué porcentaje se aplica”, dicen los supermercadistas.
Desde el sector textil explicaron que “la mayoría de los hilados subieron a la par del dólar, así como las anilinas, que son la base para darle color y terminación a la tela”. “El cuero se vende a 20 dólares, antes y después de la devaluación”, agregaron desde la marroquinería. “Cuando sube el dólar sube el papel: las papeleras primero aumentaron un 11 por ciento y luego otro 7 por ciento hasta la semana pasada. Terminaremos el mes con un aumento del 20 por ciento”, comentaron a este diario desde una gráfica.
“Los clientes me llaman, tomo la cotización del Banco Nación y les facturo. Todos los productos están dolarizados”, admitió uno de los principales fabricantes de insumos de la construcción. Describió que el perfil y la chapa de aluminio se vendían hasta ayer calculando un dólar a 26 pesos, al igual que la placa de yeso y la membrana asfáltica. En la bulonería, los importadores aumentaron los precios un 25 por ciento y la industria nacional trasladó una suba de entre el 8 y el 10 por ciento, describió un empresario del sector. En el autopartismo, el panorama es muy similar, de un traslado de entre 8 y 10 por ciento.
Estos relatos muestran que la devaluación tendrá un impacto inmediato muy fuerte sobre los precios mayoristas, que se sentirá sobre el índice minorista de mayo y junio. El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, aseguró que la inflación en mayo quedará impactada por el efecto del dólar pero que aun así estará por debajo del 2,7 por ciento de abril. Las consultoras no arriesgan demasiado y ubican la suba promedio minorista entre un rango del 2 al 3 por ciento.