El candidato a la presidencia de Venezuela, Henri Falcón, cerró su campaña en la región occidental de Lara, donde fue gobernador durante ocho años. Falcón se presenta como el oponente de mejor posición en las encuestas frente al presidente Nicolás Maduro.
“¡Desde esta tierra de gracia les decimos que Venezuela tiene nuevo presidente! ¡Nuestro pueblo decidió darse un nuevo destino!”, escribió Falcón en la red social Twitter tras el cierre de campaña. El acto se realizó en la avenida principal José Félix de La Carucieña, al oeste de la capital de Lara, Barquisimeto. “Empleados públicos no tengan miedo; porque lo que vamos a hacer es mejorarles el sueldo ¡Van a ganar en dólares!”, tuiteó el candidato a presidente.
Completan la lista de candidatos el ex pastor evangélico Javier Bertucci y el empresario Reinaldo Quijada, un ingeniero y político que lidera un pequeño partido chavista. Bertucci, cerró este miércoles su campaña con la promesa de aceptar ayuda humanitaria de Estados Unidos en caso de ganar. “Pedí ayuda humanitaria. Me dijeron: tú ganas, te dan el poder y en dos semanas te tenemos los puertos llenos de alimentos y medicinas”, expresó Bertucci ante sus seguidores en un masivo mitin en Valencia, estado Carabobo (norte), donde su iglesia tiene su sede principal.
“¿Quieren seis años más de miseria?”, preguntó a la multitud refiriéndose a las aspiraciones de reelección de Maduro. “¡No!”, le respondieron a coro.
Henri Falcón es el principal rival de Maduro en los comicios, pero el pastor ha escalado sorpresivamente en los sondeos con alrededor de 20% de preferencias entre quienes desean votar, según encuestadoras privadas.
Bertucci se define como independiente, un atractivo para sus partidarios.
“No es arrastrado por la política y nos va a dar una Venezuela nueva”, opinó Wilmer Díaz, médico que participó en el mitin final con una camiseta blanca estampada con el lema con el cual se postuló el líder religioso: “Esperanza por el cambio”. Falcón ha pedido a Bertucci retirar su candidatura para recibir su apoyo, pero éste descartó esa propuesta. Ambos rompieron un boicot de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que se negó a presentar candidatos a unos comicios que denuncia como fraudulentos.
“La unidad democrática no reconoce el evento que va a realizar el día domingo el Gobierno nacional unido al (partido de Gobierno) PSUV y a un Consejo Nacional Electoral que no ha dado la talla para ser un árbitro realmente imparcial”, dijo el diputado Juan Pablo Guanipa en nombre de la coalición antichavista.
A juicio de la MUD, las elecciones, a las que llamó simulacro electoral, tienen como único objetivo de decirle al mundo que sin votos Nicolás Maduro sigue siendo presidente de la república. “Se le está dando un golpe profundo a la democracia, ya el acta de escrutinio está hecha, ya se sabe cuánto sacó cada uno de los participantes en esa farsa”, dijo Guanipa para luego invitar nuevamente al pueblo a no asistir a lo que calificó como una farsa.
El diputado indicó además que el 20 de mayo se llevará a cabo un acto de solidaridad de toda la comunidad internacional en el que participarán, según anunció, miles de ciudadanos en centenares de ciudades alrededor del mundo para manifestarse contra los comicios. Por lo anterior, el diputado advirtió que luego de las votaciones se iniciaría la intensificación de lo que llamó el esfuerzo nacional e internacional para ejercer mecanismo de presión, para que, según dijo, este mismo año podamos tener elecciones realmente.