El presidente de Paraguay, Horacio Cartes, inauguró ayer la embajada en Jerusalén de su país, el tercero en hacer efectiva la controvertida decisión que encabezó Estados Unidos la semana pasada y que fue seguida por Guatemala, gesto que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, agradeció calurosamente (foto de Netanyahu con Cartes).
La reacción no tardó en llegar y ayer mismo el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat, trató al mandatario paraguayo de “líder irresponsable” y adelantó que tomará “medidas diplomáticas”. Para Cartes, la decisión de trasladar su embajada a la ciudad santa “concreta otro acontecimiento histórico en nuestros vigorosos lazos de amistad, que coincide con la conmemoración de la creación del Estado de Israel, que mi país acompañó en las Naciones Unidas, decidida y decisivamente, hace 70 años”. Para el líder palestino, este gesto desafía “el derecho internacional y el logro de una paz justa y duradera en Medio Oriente”.