Sergio Massa aseguró que su intención es presentarse por dentro del peronismo en 2019, aún en caso de que Cristina Kirchner finalmente sea candidata. Así se lo dijo al diputado Fernando Espinoza y a la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, en el encuentro del que participaron el jueves en Tigre, del que también formó parte la jefa del bloque de diputados del Frente Renovador, Graciela Camaño. Es la primera vez que el líder del FR expresa su deseo de aportar a la unidad del peronismo en las elecciones del año próximo, algo de lo que su partido, hasta ahora, ofrecía señales ambiguas.
Espinoza y Magario se vienen reuniendo en reserva con varios de los principales referentes del peronismo en su idea de construir internamente la idea de la unidad para enfrentar al macrismo. Generalmente se reúnen con gobernadores y legisladores del interior, pero en este caso se encontraron con Massa. Es que además de la situación del peronismo tenían otros temas en la agenda referidos específicamente a la provincia de Buenos Aires y a las cuestiones de seguridad, por eso la reunión se hizo en el centro de monitoreo de Tigre, uno de los lugares favoritos de Massa.
En este tema, una de las quejas de los dirigentes peronistas es la discriminación que aseguran sufrir de parte de la gestión de María Eugenia Vidal y de las autoridades nacionales. “Cuando asumieron ellos, en La Matanza teníamos 6 mil efectivos dedicados a la seguridad y ahora tenemos 4 mil. Pensar que en la Capital hay un total de 34 mil efectivos para la mitad de territorio”, le contaron Espinoza y Magario a Massa. El líder del Frente Renovador les prometió hacer frente común en esta problemática frente a Cambiemos, especialmente en las iniciativas que se están discutiendo en la Legislatura bonaerense.
Pero lo más interesante de la velada fue cuando se pusieron a conversar de la situación de peronismo. “Queremos que vayan todos por adentro, nadie por afuera”, desplegaron Espinoza y Magario su credo ante Massa, quien les aseguró que su idea es jugar por adentro. Sería el fin para algunas idas y venidas del massismo. En febrero pasado, Massa dio su visto bueno para que los diputados Felipe Solá y Daniel Arroyo se sumen al equipo que se puso a trabajar con la idea de un frente del campo nacional y popular para 2019 junto a Daniel Filmus, Agustín Rossi, Alberto Fernández y Chino Navarro. Pero la decisión generó un debate interno. Quienes se oponían dentro del Frente Renovador –se mencionaba a Camaño como una de ellas– veían esa convocatoria como algo armado por el kirchnerismo para que todos terminaran jugando a su favor.
Luego, cuando el senador Miguel Angel Pichetto lanzó en Gualeguaychú el agrupamiento del peronismo de “centro” o “racional”, más cercano a la visión de los gobernadores, Camaño estuvo en primera fila, definiendo a ese sector como lo opuesto al kirchnerismo con el que no pensaban juntarse. Por eso, la definición de Massa en el encuentro en Tigre del jueves fue reveladora, especialmente porque Camaño también estuvo presente. Incluso, les aseguró que jugará por adentro aún en el caso de que Cristina Kirchner fuera candidata. Claro que a Massa no le da lo mismo que la ex presidenta se postule o no, y mostró su inquietud al respecto. “Nosotros no lo sabemos. Y, la verdad, creo que a esta altura ella tampoco lo tiene resuelto”, le respondieron Espinoza y Magario. La respuesta probablemente no lo tranquilizó.
También sobrevoló la conversación la posibilidad de una candidatura de Felipe Solá, versión que tomó cuerpo en los últimos días. Dijeron que eran el presidente del PJ Bonaerense, Gustavo Menéndez, el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, y el jefe de gabinete Alberto Fernández, quienes están dedicados por estas horas a darle aire a las posibilidades de Solá. “Quien quiera ser presidente necesita ganar la provincia de Buenos Aires y Felipe sin el apoyo de los intendentes no la puede ganar”, analizaron los representantes de La Matanza, el distrito más populoso del GBA. Ese apoyo, sostuvieron en la reunión, todavía no está.