La autopsia practicada al cuerpo de George Michael, fallecido el pasado 25 de diciembre, no arrojó “resultados concluyentes”, por lo que se necesitarán “nuevas pruebas”, expresó en un comunicado la policía británica. “Los resultados de esos nuevos análisis no se conocerán probablemente hasta dentro de varias semanas”, aseguró un portavoz del cuerpo policial de Thames Valley. La misma fuente dijo que el fallecimiento del cantante británico “sigue siendo considerado inexplicable pero no sospechoso”. Michael fue hallado sin vida en su residencia en Goring-on-Thames, en el condado inglés de Oxfordshire, por su última pareja, el libanés Fadi Fawad.
La autopsia de Michael
Este artículo fue publicado originalmente el día 31 de diciembre de 2016