Un joven fue detenido en la villa 1-11-14, acusado de haber participado en el crimen de Brian Aguinaco, el chico de 14 años baleado el sábado pasado en Flores, por el cual ya había sido detenido en Chile, como supuesto autor material del crimen, un adolescente de 15 años que ayer fue traído al país.
El nuevo apresado tiene 26 años y es apodado “Yun”. Según la Policía, tiene varios antecedentes penales por delitos contra la propiedad y un pedido de captura por robo. Por su condición de prófugo, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aprovechó para renovar su latiguillo manodurista: “Fue beneficiado por la puerta giratoria”, dijo sin dar mayores precisiones.
El joven fue detenido por efectivos de la División Homicidios de la Policía Federal (PFA), con orden del juez de Instrucción Ricardo Farías, y fue comunicada al juez de Menores 7, Enrique Velázquez, durante varios allanamientos realizados en la villa 1-11-14, ubicada a pocas cuadras de Robertson y Asamblea, donde ocurrió el crimen de Aguinaco el pasado sábado 24 de diciembre.
El jefe de la PFA, comisario general Néstor Roncaglia, informó a la mañana que el presunto autor material del crimen, que había sido detenido el jueves en Chile, llegó deportado al aeroparque porteño. También confirmó que se trata de un adolescente de 15 años. Si bien cuando se conoció su detención en Chile algunas fuentes informaron que el imputado tenía 16 años, Roncaglia aseguró al hablar ante la prensa en el aeroparque Jorge Newbery, que el chico “tiene quince años” y se llama “Brian”, al igual que la víctima.
El imputado nació el 4 de marzo de 2001, por lo que cumplirá 16 recién dentro de poco más de tres meses y por su edad es inimputable para la Justicia argentina, es decir, que no podrá ser condenado.
También montada en la conmoción que generó este caso, Bullrich aseguró ayer que el año próximo deberá tratarse una reforma del Régimen Penal Juvenil porque “es una deuda que tenemos que encarar, porque es muy importante que aquellas personas menores, de entre 14 y 16 años, tengan una sanción cuando cometen este tipo de delitos”.
Las marchas de los vecinos de Flores hacia la comisaría 38ª, una de las cuales derivó en destrozos y la toma de la seccional, también tenía a la ministra como blanco, a quien le exigían que diera explicaciones.
De todas maneras, una vez llegado al país, el joven fue alojado en el Centro de Admisión y Derivación (CAD) de la Secretaría Nacional de la Niñez, Adolescencia y Familia, en Perón 2048 de esta capital, y es probable que la Justicia de Menores porteña ordene la internación del adolescente en algún instituto.
Roncaglia contó que el adolescente viajó a Chile desde el aeropuerto internacional de Ezeiza el 26 de diciembre, es decir a dos días del crimen de Aguinaco, y que el país trasandino, tras el requerimiento de la justicia argentina, “lo detuvo y luego lo expulsó”. “Nosotros lo recibimos en el paso Cristo Redentor”, señaló el jefe policial, quien luego agregó que el padre del chico, de nacionalidad peruana, si bien no fue detenido, también “fue expulsado de Chile por sus antecedentes” y “viajó en el mismo vuelo”.
Pasado el mediodía, los padres de Brian Aguinaco concurrieron a la sede del Ministerio de Seguridad de la Nación, donde fueron recibidos por Bullrich y por su par de la ciudad, Martín Ocampo, quienes les dieron un informe sobre la investigación realizada. Al finalizar la reunión, Eduardo Doto, el abuelo de Brian, se mostró conforme con la reunión, pero le pidió a la Justicia que no libere al adolescente detenido como autor material del crimen. “Ante la posibilidad de que este pibe salga por tener 15 años, se me cae a pedazos un castillo que había construido”, expresó y añadió: “Si lo dejan en la calle, la Justicia sería responsable de un gran problema”.