Como periodista, feminista, concejala del Frente para la Victoria de Rosario, secretaria de la Mujer del Partido Justicialista Santafesino y militante de la Corriente Nacional de la Militancia se presentó ayer Norma López en las audiencias públicas que realizan hasta mañana el Congreso nacional para debatir los proyectos de legalización del aborto. "Las muertes maternas por embarazos terminados en aborto son femicidios. Nuestro Estado no sólo es femicida sino que además es objetor de conciencia cuando evita practicar las interrupciones legales del embarazo que actualmente son un derecho, como el caso de Ana María Acevedo", dijo la edila, para recordar ese "caso bisagra en mi provincia, que determinó el primer protocolo provincial de acceso a las ILE impulsado por el Movimiento de Mujeres. Hace pocos días su mamá, Norma Cuevas, dio aquí uno de los testimonios más humanos que hayamos escuchado". López afirmó que "el aborto es político".
La santafesina Paula Condrac, abogada de
la familia de Ana María Acevedo, que
integra la Campana, también expuso ayer.
La concejala hizo un reconocimiento "a la Campaña Nacional por el Aborto Seguro, Legal y Gratuito que cumplió 13 años con pañuelazos verdes y a la que hace unos años me sumé; al movimiento feminista que lucha contra las injusticias y a las y los legisladores nacionales por brindar este espacio".
López planteó que iba a hablar "desde el lugar de pensar las políticas del Estado". "Rehúso debates científicos y filosóficos que plantean un problema insoluble. La principal causa de muerte materna exige una política sanitaria. Según el Ministerio de Salud de la Nación, en 2016 murieron 245 mujeres embarazadas. El 18% fueron muertes por un 'embarazo terminado en aborto', como el caso reciente de María Campos". Allí se refirió al estado femicida.
"Tenemos una de las tasas de embarazo adolescente más altas de la región (68 cada 1000), sólo superada por África. El 15% de los partos registrados en nuestro país es de adolescentes y esto es un síntoma de desigualdad y pobreza. El 60% de esos embarazos es no deseado. Más de la mitad de los jóvenes no acceden a anticoncepción gratuita", siguió recordando la concejala.
Con su pañuelo verde de la Campaña por el Derecho al Aborto al cuello, afirmó que "la legalización del aborto implica que el Estado lleve justicia social a mujeres trabajadoras y de sectores populares. El mismo Estado que hoy desampara por la clandestinidad de las prácticas, permite en la salud pública tener profesionales objetores de conciencia y, admite el negocio sobre nuestros cuerpos, en manos de profesionales de la salud privada. Es decir, asistimos a un doble estándar".
De convicción kirchnerista, López recordó que "la maternidad debe ser una elección y no una imposición. Nuestro país tiene muchas leyes progresistas para las mujeres madres, como las sancionadas durante la gestión de Cristina Fernandez: fertilización asistida ‑que incluye a personas gestantes‑; reasignación de género; nuevos alcances en materia de derecho de familia, adopción y derechos de niños, niñas y adolescentes. Pero poco hay en el reconocimiento a las mujeres como personas deseantes. Mientras a nosotras nos castigan por abortar, buena parte de la sociedad protege, a varones que abandonan a sus hijos e hijas".
López propuso "resignificar el concepto de 'lo personal es político' por 'el aborto es político'. El aborto es un hecho político que transcurre en la clandestinidad con el riesgo de cada mujer de vivir o morir según su condición económica, social y cultural. El aborto necesita incorporarse como derecho a la salud pública que permita su acceso en condiciones seguras. Ninguna mujer será obligada a abortar. Pero tampoco, ninguna mujer será obligada a morir. La democratización de políticas para las mujeres solo será posible si se respeta la autodeterminación sobre nuestros cuerpos".
La edila excedió unos segundos el tiempo estipulado, que son siete minutos para cada exposición. "El próximo 13 de junio, nuestros 157 diputados y nuestras 100 diputadas decidirán para más de 20 millones de mujeres argentinas. Es la gran oportunidad para votar por la ampliación de derechos", dijo y arengó: "Sepamos que Latinoamérica nos observa". Más tarde, la santafesina Paula Condrac, que fue abogada de la familia de Ana María Acevedo y es integrante de la Campaña, argumentó por el derecho a decidir.
