El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Ricardo Silberstein, estableció ayer el valor de la recompensa para quienes ayuden a esclarecer el ataque a las viviendas donde habitara el juez Ismael Manfrín, quien condenó a la banda de Los Monos: será de un millón y medio de pesos a distribuir entre aquellas personas que aporten datos útiles, relevantes y decisivos al esclarecimiento de los hechos.
En cuanto a la investigación del ataque, está a cargo de la Unidad Fiscal de Delitos Económicos y Complejos de la Fiscalía Regional de la Circunscripción Judicial Nº 2 del Ministerio Público de la Acusación (MPA), integrada por Natalia Benvenuto y Valeria Pedrana.
La información y los datos relativos a la causa deberán ser aportados en la sede del Centro de Asistencia Judicial (CAJ) de Rosario, ubicado en calle Corrientes 2114. Este organismo de inmediato dará conocimiento a la dirección Provincial del Programa de Acompañamiento y Protección de Víctimas y Testigos, dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
En cuanto a la identidad de quienes aporten datos firmes, la resolución firmada por el ministro Silberstein aclara que los nombres de quienes brinden información y de quienes resulten adjudicatarios de la recompensa serán mantenidos en secreto antes, durante y después de finalizada la investigación y/o el proceso judicial. Además, se destaca que el pago de la suma fijada será abonado previo informe del representante del MPA y de la dirección Provincial del Programa de Acompañamiento y Protección de Víctimas y Testigos en relación al mérito de la misma.
Ayer, Ema Chamorro ingresó a la cárcel de Rawson, junto a Peñalba, de
la Los Patrones.
Por su parte el gremio de la Regional Nº8 de la Unión de Empleados de la Justicia Nacional que abarca Rosario, Santa Fe, San Nicolás, Venado Tuerto y Rafaela fue contundente en expresar su repudio a la intimidación que sufrió el martes pasado Manfrín: "Nos vemos nuevamente en la necesidad de expresar nuestro más enérgico rechazo a los ataques traicioneros y cobardes efectuados en Rosario contra los domicilios en donde residía uno de los magistrados que llevaron adelante un juicio penal de la banda de narcocriminales más peligrosa que tienen su asiento en nuestra ciudad y sus alrededores".
"Este hecho no solo afecta al magistrado y a todos sus colegas tanto provinciales como federales sino que involucra a la comunidad judicial en su conjunto y por ende a toda la sociedad en general. La impunidad con la que se llevó a cabo estos lamentables hechos mafiosos indudablemente pone en vilo y zozobra a toda nuestra vida cotidiana", añadieron.
"No cabe duda que este tipo de sucesos requieren una respuesta de la comunidad en general y principalmente de todos los estamentos estatales, quienes se deben comprometer firmemente a perseguir y castigar enérgicamente con todos sus recursos los mentados atentados, ello si es que queremos seguir viviendo en una sociedad donde reine el derecho, la justicia y no la fuerza como la de estas bandas que se gobiernan de forma siniestra y con perfiles claramente mafiosos", remarcaron.
Ayer en tanto la Policía Federal completó el traslado de dos integrantes de la banda: Jorge "Ema" Chamorro ingresó a la cárcel de Rawson, junto a un compañero en la causa Los Patrones, Luis Pedro Peñalba. El miércoles por la madrugada Guille Cantero había sido alojado en la cárcel de Resistencia.
Esta fue una decisión del Tribunal Oral Federal Nº 3 de Rosario, que juzgará a los tres ahora trasladados y otras 29 personas por la causa Los Patrones, que en noviembre de 2015 desbarató la operatoria de una célula de Los Monos que manejaba un centro de acopio de drogas, cuatro bocas de expendio e importaba marihuana desde el Paraguay vía la localidad correntina de Itatí.
Romina Bedetti, abogada de varios integrantes de esta banda, se quejó del traslado. "Cada situación de violencia que pasa en la ciudad de Rosario, los primeros nombres que suenan son los de ellos. Sólo se habla que los internos quieren decidir el lugar del alojamiento, estamos hablando que hay familias que tienen que trasladarse. Hay distancias muy grandes y hay niños con distintas aflicciones que van a estar privados de la posibilidad de ver a sus padres", señaló la letrada.