El gobierno nacional decidió no renovar el reintegro del 5 por ciento del IVA sobre las compras realizadas con tarjetas de débito. El beneficio fue creado en 2001 y renovado periódicamente. Incluso Cambiemos lo prorrogó en abril y lo contempló en el Presupuesto 2017 aprobado por el Congreso.
El cambio de postura del Ejecutivo para aumentar la recaudación llega después del acuerdo por la modificación al Impuesto a las Ganancias durante las sesiones extraordinarias.
El viernes durante una conferencia de prensa en Casa Rosada, el flamante ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, adelantó que su objetivo sería bajar el déficit fiscal y en su primer día hábil al frente de la cartera ésta sería la primera medida para aumentar la recaudación y un primer indicio de la anticipada reforma impositiva.
"Tengo el desafío de cumplir con el presupuesto”, sostuvo también Dujovne, y en ese sentido comenzó a cumplir para acercarse al déficit del 4,2 por ciento del PBI proyectado para el año próximo, pero no a la continuidad del reintegro que también fue contemplada en el presupuesto votado por el Congreso, con un costo fiscal de 7.500 millones de pesos.
Según un informe elaborado por la Cámara de Tarjetas de Crédito y de Compra (Atacyc), las transacciones realizadas a través de tarjetas de débito crecieron un 19 por ciento interanual hasta noviembre de 2016, lo que redundaba en un ahorro para los bolsillo de los trabajadores.