La rumana Simona Halep, número 1 del mundo, se sacó hoy una espina. Había llegado a la cima del ranking mundial sin haber obtenido un título de Gran Slam. En su tercera final de Roland Garros pudo gritar campeona y confirmar que es la mejor tenista de la actualidad.
Dos horas de partido necesitó para batir a la norteamericana Sloane Stephens por 3-6, 6-4 y 6-1. Halep había llegado a París como la primera clasificada y su rival en el puesto 10. La sorpresa se dio en el primer set, cuando Stephens quebró el saque de la rumana. Parecía que se podía dar la sorpresa, sobre todo en un segundo set muy parejo, en el que Halpe pudo sacar una luz de distancia. La tercera manga mostró toda su autoridad para alzarse con un torneo en el que había llegado a la final en 2014 y 2017.
Con algo más de 23 millones de dólares en ganancias, la jugadora de 26 años también fue finalista de Australia este año y semifinalista en Wimbledon 2014 y en el US open de 2015. El número 1 del mundo lo puso en juego en la semifinal ante la española Garbiñe Muguruza, campeona en 2016, una final anticipada.
Mañana será el duelo de varones entre el español Rafael Nadal y el austríaco Dominic Thiem. Nadal buscará su onceavo título en Roland Garros, mientras que para Thiem es su primera final de Grand Slam.