El nuevo ministro de Producción, Dante Sica, mantuvo ayer reuniones con el presidente Mauricio Macri y con su predecesor, Francisco Cabrera. En la cartera no se esperan grandes cambios en las segundas y terceras líneas, aunque todavía no hay certezas. El jueves será la jura de Sica y de Javier Iguacel como ministros de Producción y Energía, respectivamente. Sica es el piloto de tormenta de Macri para enfrentar un escenario industrial muy complejo para los sectores que dependen del mercado interno: la licuación de ingresos de los trabajadores por la devaluación y la inflación, los altos costos internos de los insumos, tasas de interés y tarifas en un horizonte de fuerte ajuste fiscal, con el FMI como verdugo, ofrecen un panorama negro para la industria nacional que le vende al consumo interno. La devaluación sólo le ofrece oportunidades a determinados rubros de perfil muy exportador. Sica aparece en ese esquema general y no implica un cambio de rumbo en materia de política industrial, aunque tiene para aportar mayor capacidad de gestión y su experiencia como secretario de Industria en la presidencia interina de Eduardo Duhalde, en 2002.
“El cambio oxigena la relación con la industria de cara a los próximos meses que van a ser muy difíciles. Sica tiene buen diálogo con el aparato productivo, permitiría tener un contacto más fluido. De todas maneras, en este escenario macroeconómico, las posibilidades de la política pública sectorial son limitados”, comentó un funcionario de Producción.
El sábado a la noche se conoció la noticia del cambio en el gabinete. La salida de Cabrera sorprendió a varios porque es un hombre del riñón de Macri, fue presidente de la Fundación Pensar y se desempeñó como ministro de Desarrollo Económico porteño entre 2007 y 2015. Previamente fue CEO de la AFJP Máxima. Su gestión a nivel nacional estuvo delegada en sus secretarios Miguel Braun, en comercio, y Martín Etchegoyen, en el área industrial. A principios de marzo de este año, Cabrera mantuvo una serie de cruces con la dirigencia de la UIA, a quienes les sugirió “que se dejen de llorar y que se pongan a invertir y a competir”. La central fabril había difundido un documento en el que advertía por el crecimiento de las importaciones, caída del consumo, costo energético y la tasa de interés.
Sica fue secretario de Industria, Comercio y Minería en 2002, durante la presidencia interina de Eduardo Duhalde. Luego fundó su consultora Abeceb, que concentra su trabajo en temas comerciales, en la relación económica con Brasil y en determinados sectores como automotor y minería, entre otros. “Un dólar que oscile entre 28 y 29 pesos deja muy cómodas a muchas actividades. A algunas les da un espaldarazo para la salida exportadora, mientras que para otras genera un desincentivo para consumo, en especial para ciertos bienes de consumo que son competitivos con la industria local”, dijo Sica luego de conocerse su designación. En los pasillos de Producción no se esperan grandes cambios de nombres en las secretarías y subsecretarías. “Un cambio de colaboradores requiere meses de adaptación, estaríamos casi en 2019”, dicen, aunque nadie se anima a confirmar su continuidad.