Vecinos del barrio Gabriel Miró de Villa Fiorito, en Lomas de Zamora, cortaron el Camino Negro, el acceso sur a la Capital Federal, en reclamo de agua potable. La empresa AySA que realiza obras para conectar al barrio con la red de agua aseguró que recién a mitad de año estarán finalizados los trabajos. 

Las 20 manzanas donde viven entre 400 y 500 familias fue conectado a la red de agua potable por medio de un empalme transitorio realizado por AySA, hasta que finalicen las obras que llevarán agua desde la estación elevadora de Floresta. Como la conexión pierde presión en temporadas de alto consumo, la empresa estatal de aguas se ocupaba de distribuir agua en camiones, que los vecinos deben buscar con baldes y bidones. Los más afectados de Fiorito por la baja presión son los que se encuentran dentro del perímetro de las calles Reconodo, Murature, Ejército de los Antes y Camino Negro

Pero a la falta de presión del empalme se sumó, según los vecinos, la rotura de un caño maestro que los abastecía. Desde entonces no hay agua en el lugar. Una de las vecinas, Marianela, contó que “solo les llega (el agua) por medio de un camión cisterna que alcanza para abastecer a cinco de las 20 manzanas del barrio”. 

La respuesta de la empresa AySA fue que en febrero de 2016 se iniciaron obras de tendido de una red de agua potable en el marco del plan Agua + Trabajo, que estará terminada “entre junio y agosto” de este año.