El dirigente mapuche Facundo Jones Huala levantó la huelga de hambre que mantenía desde hace 23 días luego de llegar a un acuerdo con autoridades penitenciarias para celebrar mañana el año nuevo mapuche en la unidad penal de Esquel. “Le hemos torcido el brazo con la lucha a una parte del poder”, celebró el lonko de la comunidad en resistencia de Cushamen en un audio difundido ayer, en el que anunció la suspensión de la medida de fuerza y alentó a las comunidades mapuches a seguir la lucha contra mineras, petroleras y forestales.
Jones Huala había iniciado la huelga de hambre en rechazo al pedido de detención de su hermano Fausto y de Lautaro González (los jóvenes que bajaron del cerro a Rafael Nahuel luego de recibir los disparos de la Prefectura Naval que le costarían la vida), a lo que se sumó luego el reclamo para realizar dentro de la cárcel la ceremonia comunitaria. Con el paso de los días endureció la huelga y dejó de ingerir líquidos.
“He decidido suspender momentáneamente al menos la huelga de hambre debido a una serie de conversaciones con parte aquí del SPF, donde se habrían logrado algunas de las demandas que teníamos”, informó ayer. “Esto hay que entenderlo como una victoria colectiva, principalmente de las comunidades y el pueblo mapuche movilizados y organizados, como una pequeña batalla ganada en esta gran confrontación histórica y milenaria contra los Estados opresores y el sistema capitalista”, propuso.
“Es lamentable que se haya tenido que tomar una medida de fuerza dada la sordera y ceguera institucional. Esto comienza con un desconocimiento de leyes y tratados internacionales del juez (Gustavo) Villanueva”, señaló su defensora Sonia Ivanoff. “Esto es una persecución política por ser mapuche, por cómo se piensa, por la ideología que se tiene, por una forma de ver el mundo distinta. Esperemos que el día 25 se pueda desarrollar esta ceremonia de la mejor manera posible”, agregó la abogada en referencia al Wiñoy Tripantu, la ceremonia del solsticio de invierno de las comunidades mapuches. Ivanoff recordó que el 3 de julio se realizará una audiencia en los tribunales de Comodoro Py sobre su pedido de excarcelación de Jones Huala.
“Le hemos torcido el brazo con la lucha a una parte del poder. Si bien no lo hemos derrotado realmente yo creo que esto es un hecho histórico y es un golpe fuerte al sistema que va a quedar marcado de por vida”, expresó el dirigente, quien sugirió “seguir avanzando a pesar de todas las internas, de todas las discusiones y malentendidos que podemos tener a veces entre comunidades. El lonko pidió “seguir luchando contra la opresión, contra el capitalismo, más allá de toda coyuntura, más allá de quién esté en el poder en el momento, lo importante es que podamos reconstruir nuestro mundo, recuperar nuestras tierras, nuestra identidad, nuestra fortaleza, querernos como nos merecemos entre mapuche”. “Dejarnos de pelear entre nosotros y dirigir la bronca a nuestro verdadero enemigo que es el gringo capitalista, el opresor, el que nos roba, el que nos usurpa, el que nos asesina”, explicó, y destacó que “si no logramos levantar esta lucha de este pueblo y vencer en estas generaciones que están ahora, lamentablemente en un par de años más el pueblo Mapuche se va a extinguir” porque “no vamos a tener más tierras productivas”, ya que “van estar todas arrasadas y contaminadas, y seguramente militarizadas”.