Escrito justo después de M Train, su segundo libro de memorias, Devoción es un libro muy particular. Principalmente, por su origen: es el fruto de una invitación que Patti Smith recibió de la Universidad de Yale para dar una charla sobre su proceso de escritura. La invitación incluyó la publicación de un ensayo basado en esa charla, que inauguró el año pasado una colección de la universidad titulada Por qué escribo. (En septiembre saldrá uno de Karl Ove Knausgaard). Pero en lugar de ser simplemente un ensayo sobre la escritura, Devoción invita al lector a sumergirse en ese proceso reuniendo un texto de ficción, un diario de viaje de la época de la escritura de ese texto (cuyo estilo delata la filiación con M Train), y un ensayo final que intenta responder más directamente al título de la colección. Algunas de sus frases fueron leídas por Smith en la conferencia de prensa que dio antes de sus shows porteños, luego de que le preguntasen cuál era su motivación para crear. Descubrió el libro en mano de uno de los presentes y se lo pidió para leer algo que –dijo– era su mejor respuesta a esa pregunta.
Mas allá del mecanismo de la creación o sus razones para la misma, la gran sorpresa de Devoción es el cuento que da nombre al libro, ya que es su debut en la ficción. Sin embargo, en las entrevistas que ha dado vinculadas al volumen, la cantante aclara que es apenas el primero publicado, porque hace años que viene trabajando en eso. Es más: precisó que durante los 14 años que se recluyó en Michigan, abandonado el negocio de la música para dedicarse a sus hijos y su marido, se dedicó –durante el escaso tiempo que podía robarle a los quehaceres domésticos– exclusivamente a la escritura. Algo que, anuncia, pretende volver a hacer desde que cumplió sus 70 años, así que se puede suponer que alguna de aquellas ficciones terminen acompañando las nuevas que vayan tomando forma.
Lectora voraz, compulsiva compradora una y otra vez de sus libros preferidos (Crónica del pájaro que da cuerda al mundo, de Murakami; 2666, de Bolaño), Patti ha confesado que cuando escribió Devoción estaba en su período Modiano. Los fanáticos de su música no deben asustarse por tanta literatura, ya que habrá nuevo disco: promete entrar en un estudio antes de fin de año con su banda y sus dos hijos, con los que viene presentándose en vivo. Pero su principal interés seguirá siendo la escritura: está trabajando en otro libro de memorias, que funcionará como complemento del best seller Éramos unos niños. Pero en vez de su vida con Mapplethorpe, este se centrará más en su carrera artística y en su relación con el guitarrista Fred “Sonic” Smith, el verdadero amor de su vida, su marido y el padre de sus hijos.