Las selección japonesa de fútbol dio muestras de su gran capacidad de reacción para igualar ayer 2-2 con Senegal, en su partido por la segunda fecha del Grupo H jugado en Ekaterimburgo en el que estuvo dos veces en desventaja. Sadio Mané y Moussa Wague adelantaron dos veces a los africanos, pero Takashi Inui y Keisuke Honda igualaron en ambas ocasiones para los nipones. Con el empate, Senegal y Japón lideran el Grupo H con cuatro puntos, seguidos por Colombia, con tres, y Polonia, sin puntos.
El juego tuvo una paridad marcada en el desarrollo, con un ligero predominio de los senegaleses por su mayor potencia física para imponerse en las jugadas divididas. Esa ligera ventaja le alcanzó para llegar más que su rival a la valla de Kawashima, aunque necesitó de un doble error de la defensa nipona para abrir el marcador. Haraguchi intentó despejar en un centro desde la derecha, pero le regaló el balón a Sabaly. El atacante africano remató al arco y Kawashima dejó un rebote en el medio del área, donde estaba Sané, que metió la pelota en el arco casi sin proponérselo.
Otra llegada de Mané pudo servir para aumentar la ventaja, aunque esta vez el portero respondió con acierto. De a poco, Japón mejoró a partir del crecimiento de Kagawa, que se hizo eje de los ataques. En la mejor jugada de la primera mitad, Inui se filtró por el costado izquierdo del área y definió con categoría al segundo palo para marcar el empate.
Tras la pausa, Senegal pareció más decidido a buscar la victoria. Si bien los japoneses se acercaron con un cabezazo de Osako que controló el arquero Khadim N’Diaye, fueron los africanos los que insistieron a partir de la potencia de Niang. El delantero del Torino, con sus remates desde lejos, inquietó al fondo japonés, aunque le faltó puntería para convertir el gol. Cuando mejor plantado parecía Japón, Senegal golpeó con contundencia. Sabaly desbordó por la izquierda y envió un centro que Niang desvió en el primer palo y Wague definió con un remate alto para sentenciar el 2-1.
Japón no pareció sentir el impacto y siguió con la misma voluntad e insistencia. Por eso su búsqueda tuvo premio siete minutos más tarde cuando Honda aprovechó una falla de N’Diaye en un centro para marcar la igualdad.
Los dos siguieron en busca del triunfo, pero ya no pudieron quebrar a la defensa rival. El empate fue justo y dejó bien parados a los dos equipos de cara al cierre del grupo.