El primer antecedente fue, valga la redundancia, la primera vez argentina en un Mundial. En Uruguay 1930, la primera Copa de todas, los muchachos dirigidos por Francisco Olazar debutaron en su grupo frente a los galos y se impusieron por 1-0 con gol de Luis Monti a los 81 minutos. En aquel equipo despuntaban varios de los próceres del fútbol nacional: Natalio "Pantalonazo" Perinetti, Francisco "Pancho" Varallo, José "Pechito" Della Torre, Carlos "Barullo" Peucelle (suplente en ese encuentro) y Guillermo "Filtrador" Stábile, quien a pesar de no jugar frente a Francia finalizaría el certamen como máximo goleador del mismo. Esa Selección llegaría a la final de la primera Copa de todas para caer con la anfitriona Uruguay por 4-2.
El segundo y último enfrentamiento entre Argentina y Francia fue en 1978, por la primera fase. En el Monumental, los de César Menotti se impusieron por 2-1 con goles de Daniel Passarella, de penal, y Leopoldo Luque. La igualdad transitoria para los europeos la puso la figura rival, Michel Platini. Como es sabido, Argentina se consagraría en la final frente a Holanda y sumaría su primer Mundial, bajo la noche de la Dictadura.