La primera ministra británica Theresa May nombró ayer a un diplomático de carrera, Tim Barrow, como nuevo embajador ante la Unión Europea (UE), tras la sorpresiva dimisión de su predecesor, Ivan Rogers, anunció una fuente gubernamental. 

Barrow, ex embajador en Moscú y Kiev y dos veces en la representación diplomática en Bruselas, reemplaza a Rogers, quien el martes renunció a menos de tres meses del inicio de las negociaciones para la salida británica de la UE, criticando al gobierno por su falta de preparación para el Brexit, lo que significa un duro desafío para su sucesor en un momento crucial. La dimisión de Rogers destapó la tensión entre dirigentes dentro del gobierno contrarios al Brexit y los que están a favor, además de aumentar la posibilidad de una ruptura dura con el bloque. 

Los partidarios del Brexit duro saludaron la dimisión de un hombre al que culpaban de haber frenado la ambición de David Cameron cuando fue a reclamar concesiones a Bruselas antes del referéndum del 23 de junio. Pero, su gran error habría sido advertir al gobierno de que el resto de países de la UE no cree posible llegar a un acuerdo comercial con Londres antes de 10 años, en vez de los dos que preconiza el gobierno de May.