“Estamos ante un conflicto que no solo es por despidos. Es también por la libertad de opinión, de expresión y de pensamiento”, resaltaron esta tarde los trabajadores de Télam, quienes ocupan de manera pacífica las instalaciones de la agencia oficial desde hace una semana, tras la decisión del titular del Sistema Federal de Medios Públicos, Hernán Lombardi, de despedir a 357 empleados. Los trabajadores confirmaron que el viernes pasado presentaron, con el aval de 14 legisladores, un proyecto de ley para convertir a Télam en una empresa periodística pública con control parlamentario. además, adelantaron que mañana interpelarán a Lombardi en el plenario de las comisiones de Legislación del Trabajo y de Libertad de Expresión y Comunicaciones, y que el próximo jueves realizarán una gran marcha nacional desde el Obelisco hasta el CCK, acompañados por todos los sindicatos de prensa del país.
Los trabajadores inscribieron el conflicto de Télam en el marco de un “debilitamiento del ecosistema de los medios públicos en Argentina” y denunciaron que el Gobierno “quiere medios cada vez más débiles, más chicos y menos plurales para imponer su mirada de la realidad”. “El nuestro es un gigantesco proceso de disciplinamiento. Nos despiden para disciplinar a esta redacción, para ejemplificar. La patronal nos da una alternativa: obediencia o despidos, obediencia o desempleo. Quieren que seamos periodistas sumisos, que no tengamos rebeldía, quieren periodistas que no pregunten”, advirtió Mariano Suárez, delegado de Sipreba.
Los periodistas denunciaron el progresivo vaciamiento de la agencia estatal, evidente con el cierre por despidos de las corresponsalías de Formosa, Chaco, Catamarca y Chubut. "El desguace de este medio público, que garantiza la pluralidad de voces y la cobertura federal informativa del país, se materializa a través del vaciamiento del área que controla administrativamente el manejo de la pauta publicitaria oficial, el cierre de la mayoría de las corresponsalías en el interior del país y el desguace de partes o la totalidad de las secciones periodísticas operativas de la agencia", aclaran los trabajadores en conflicto.
Por otro lado, advirtieron que la decisión del gobierno de cerrar la agencia tiene dos objetivos: por un lado, “consolidar la alianza estratégica con el sector más concentrado de la Industria de la comunicación”, para lo cual es necesario “reducir los medios públicos a la mínima expresión” y, por otro, “consolidar la destrucción plena del estado nacional”. La excusa de Lombardi para justificar los despidos de trabajadores con más de 20 años de antigüedad había sido la falta de presupuesto, pero los periodistas también desenmascararon ese argumento. “Lo que se ahorran es sólo 250 millones de pesos, o sea, 4 horas de intereses de Lebac. No se ahorra nada mientras se deja al país sin información y, al mundo, sin saber qué está pasando en el país”, subrayó Daniel Segal, delegado de Sitrapren.
Durante la conferencia se escucharon innumerables mensajes de solidaridad de agencias y medios extranjeros con los afectados, quienes se enteraron de sus despidos al encontrar sus indemnizaciones en sus respectivas cuentas o a través de otros medios, en los cuales el ministro del sector celebraba la medida.
Entre los dirigentes que manifestaron su solidaridad con los afectados, se encontraba Nora Cortiñas, quien advirtió que en la agencia oficial "no sobra nadie, todos son trabajadores que hacen que la Patria vuelva a ser como era y estemos todos orgullosos”. “Estamos avergonzadas de lo que está pasando con Télam, con los hospitales, con el Senasa y con el Inti porque el Gobierno no sabe valorar el valor humano”, expresó la integrante de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora..
“La metodología para despedir es perversa, hipócrita y ya no nos imaginábamos tanto. A las madres, que vivimos la dictadura cívico militares, eclesiástica y económica nos da vergüenza que después de tanta lucha lleguemos a esta situación. Pedimos la reincoproración de todos y todas ya y pedimos que se solucione el problema de trabajo en todo el país”, concluyó antes de que se escuchara un aplauso cerrado.