A raíz de la denuncia de una alumna (en las redes sociales, el Inadi y la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires) hace unos días nos enteramos de que la cátedra de Maquillaje y Caracterización de la Universidad Nacional de las Artes (UNA) viene promoviendo (al menos desde el 2016, según lo publicado en su perfil de Facebook) la práctica racista conocida como “blackface”, o en español “corcho quemado”.
Durante el curso los profesores invitan a los alumnos a maquillarse la cara y el cuerpo con lo que serían los rasgos de una persona negra y luego disfrazarse y actuar como un personaje estereotipado, entre las risas de sus compañeros. El caso generó un gran debate en las redes, entre los que apoyan a la comunidad afro y los que defienden que no hay connotación racista en el ejercicio pedagógico eligieron llamar “maquillaje mulato”. Atención en este punto: mulato es una palabra racista. Nace del cruce entre el caballo (superior) y el burro o mula (inferior).
En la noche del miércoles 27, la página de la Cátedra publicó un texto agresivo en el que defendían la práctica y la metodología de la Universidad. A la mañana siguiente, el texto había sido borrado. Alguno podría preguntarse por qué tanto lío, teniendo en cuenta que el blackface es una práctica frecuente en este país. Sin embargo la pregunta es: ¿conocen su origen?
El blackface es la caracterización de personajes del teatro a partir de estereotipos racistas. Surgió como una representación caricaturesca de esclavizados en principios del siglo XIX en Estados Unidos. Se trataba y se trata de una narrativa prejuiciosa para representar al “otro”, a través de la cual el opresor se siente cómodo para sobreponerse. Esta práctica se reproduce en casi todas las escuelas de Argentina durante las celebraciones del 25 de Mayo, cuando los docentes además insisten en retratar al negro con el estereotipo anacrónico del vendedor de escobas o de empanadas.
La educación, en especial la educación para las artes, en lugar de recuperar prácticas discriminatorias del siglo XIX, debería cuestionar las problemáticas sociales. El blackface es fruto de una educación equivocada que se perpetúa. La pregunta es: ¿qué van a hacer las escuelas y las Universidades para cambiar esta realidad hoy? Después de todo, ¿serán capaces de reflexionar sobre los discursos de blanqueamiento o seguirán evitando estos debates y negando la presencia de afrodescendientes en la formación étnico-racial de este país?
No se trata simplemente de pintar el cuerpo. Cuando el blanco recrea este personaje, él en otras palabras está diciendo cuál es el “tipo” de afrodescendiente “preferible” en esta sociedad. La manera estereotipada, primitiva, “inocente”, “ignorante”, subalternizada, “del bufón”, “de la negra agrandada” y cuerpos hipersexualizados demuestran también la manera en la que el blanco ve estos cuerpos. El blackface presente en las celebraciones del 25 de Mayo y la UNA es resultado de una educación racista en todos sus niveles. ¿Y por dónde tendrían que empezar los cambios? Creo que el camino podría ser el diálogo con los movimientos sociales afro. Actualmente los movimientos afrodescendientes y africanos buscan que la sociedad argentina tenga más información y que participe en la lucha contra el racismo. Buscan una (re)construcción de conocimiento acerca de la historia afrodescendiente. Las organizaciones están abiertas al diálogo en la UNA, en las escuelas, en donde sea, y quieren promover la Ley 26852, que es la Ley María Remedio del Valle, la madre de la Patria, mujer afrodescendiente tan poco conocida por esta Nación. Las organizaciones aspiran a que Argentina sea un país sin blackface, donde no se agreda a la población afro en la calle, no solo por parte de la policía sino de todos. Deseamos una Argentina en la cual los jóvenes ya no tengan que pasar por este constreñimiento en las escuelas y universidades.
Denise Braz: Activista feminista afro.
Al cierre de esta edición las autoridades de la UNA se reunieron con la Comisión Organizadora 8 de noviembre y el Colectivo Passarinho y prometieron rever el uso del blackface y realizar acciones conjuntas para luchar contra el racismo.