El año pasado se cumplieron 50 años desde que Inglaterra y Gales despenalizaron (parcialmente) la homosexualidad, momento hito en la historia de la lucha LGBTQ dentro del Reino Unido. Frente a las bodas de oro, organizó el reputado British Museum la exposición Desire, love, identity: Exploring LGBTQ histories, una muestra que puso piezas de su colección bajo luz queer, mostrando el deseo y el amor entre personas del mismo sexo en el arte, desde la Antigüedad hasta la actualidad. Cuestión que, aunque la mentada muestra finiquitó el pasado octubre, el British Museum acaba de anunciar que en breve volverá al ruedo, de gira por ciudades británicas como Oxford, Nottingham, Bolton y Norwich, en un tour que arrancará el venidero septiembre y que pretende subrayar cómo el deseo gay ha existido en todas las sociedades, en todos los tiempos. Basta con echar un vistazo a las vedettes de la muestra itinerante... En principio, la pieza más antigua del conjunto, la escultura de los amantes de Ain Sakhri, que data del año 9000 a.C. y es considerada la primera representación de la historia de una pareja teniendo sexo. Aunque tradicionalmente se ha asumido, pese a la ambigüedad de las figuras, que se trata de un hombre y una mujer, la exposición siembra el manto de la duda, con un rótulo que reza: “¿Por qué se ha dado por sentado que se trata de amantes heterosexuales?”. En la ecléctica variedad, no faltan ni un busto del bello Antínoo, amante favorito del emperador romano Adriano, ni una atípica moneda con su rostro, forjada para apaciguar la tristeza del soberano al fallecer temprana y súbitamente su enamorado. Tampoco una copa de plata enterrada cerca de Jerusalén en el siglo 1 dC donde claramente se ven a varones teniendo sexo, considerado “el santo grial” de la historia gay. Girará además un antiguo ánfora griego que representa a la poetisa Safo de Lesbos, símbolo del amor entre mujeres; ilustraciones homoeróticas de David Hockney inspiradas en los poemas de Konstantino Kavafis; una baraja de cartas con drag queens made in Japan a fines de los 90s, entre otras incitantes bondades queer.