En medio de un gran operativo de seguridad, partidos de izquierda y sindicatos se movilizaron ayer para rechazar el acuerdo con el FMI y la presencia en el país de su directora Christine Lagarde. “Lagarde tiene la difícil tarea de mostrar que hay un FMI distinto, preocupado por los sectores sociales. Pero es todo falso”, advirtió Myriam Bregman, referente del PTS en el Frente de Izquierda (FIT). El acuerdo con el FMI implica “un plan de guerra contra la clase obrera”, destacó Vanina Biasi, del Partido Obrero. “El acuerdo sella la entrega de nuestras vidas a la dictadura del mercado”, señaló por su parte Silvia León, de ATE y la CTA Autónoma.
La de ayer fue la tercera movilización contra el FMI desde la llegada de Lagarde, el viernes. El acto del FIT tuvo lugar en la esquina de Pueyrredón y Las Heras, en Recoleta, porque el operativo policial impidió a los manifestantes acercarse al centro de Convenciones donde se reunieron ministros y presidentes de los bancos centrales de países del G-20.
“Montaron un operativo muy grande, que cercena absolutamente el derecho a manifestarse”, se quejó Bregman, actual legisladora porteña. “Estamos repudiando la presencia de Lagarde y el FMI, que imponen un ajuste más duro y severo contra el pueblo trabajador”, afirmó el diputado Nicolás del Caño, que reclamó “a las centrales sindicales la convocatoria a un verdadero plan de lucha con un paro nacional activo”.
“A nadie se le hubiese ocurrido cenar el Día del Amigo con Christine Lagarde. Esto hizo Macri, mostrando verdaderamente quienes son sus amigos y amigas: los que vienen a decir que hay que bajar salarios, despedir trabajadores del sector público y que tenemos que ajustarnos mientras las clases dominantes fugan millones”, señaló Cristian Castillo, del PTS. “Pero Macri no está solo. Mientras habla en TV o hace conferencias de prensa, los gobernadores se estaban reuniendo con la Casa Rosada para negociar cómo ajustar en sus provincias. Esto es una continuidad de lo que viene pasando desde que Macri está en el gobierno porque es minoría en el senado y en diputados y sin embargo logró la votación de 122 leyes en contra de los intereses de los trabajadores y el pueblo”, destacó.
“El plan de guerra” del FMI apunta a “la destrucción el sistema jubilatorio, elevar la edad jubilatoria y castigar a la clase obrera con la reducción salarial”, destacó Biasi, quien anunció recortes del 10 al 20 por ciento en salarios de estatales y docentes por “los pactos de Macri y la oposición pejotista”. “La clase obrera tiene que dar respuesta y para eso va a tener que superar los límites que impone la CGT y las centrales que no están dispuestas a enfrentar este plan de guerra”, advirtió.
“La llegada del G-20 está absolutamente ligada a los acuerdos que ha firmado el gobierno de Macri con el FMI. Forman parte de una misma política en la que el Estado se corre de su rol central en la seguridad social y avanza la privatización de las cajas jubilatorias, lo que se suma a las consecuencias que trae el ajuste al trabajo y la economía”, afirmó León, secretaria de organización de ATE. “El acuerdo con el FMI sella la entrega de nuestras vidas a la dictadura del mercado. Ratifica un modelo de país dependiente, en el que se pretende seguir precarizando el trabajo con la reforma laboral y atacando las jubilaciones con la entrega del Fondo de Garantía a los especuladores”, afirmó Adolfo Aguirre, secretario de comunicación de ATE. “Es la coronación de un modelo económico fallido y nefasto para la clase trabajadora argentina, que beneficia al capital especulativo mientras reprime y persigue a quienes luchamos contra los despidos, por derechos y salarios dignos”, destacó Aguirre, que también es secretario de relaciones internacionales de la CTA Autónoma.
“El acuerdo Macri-FMI viene a seguir engrosando la deuda a costa nuestra para el beneficio de unos pocos especuladores y empresas que coinciden con el nuevo presidente del Banco Central cuando dice con sinceridad que ‘es lo mejor que nos puede haber pasado’, sólo que piensan en sus bolsillos y no en nosotres”, destacó en un comunicado Libres del Sur, que también participó de la movilización.