Es unánime la lectura. El déficit de Central está en la zaga central. Lo saben los dirigentes, hinchas, lo sabía Coudet y también lo sabe Paolo Montero, está claro. Por ese motivo, fue el principal pedido del flamante entrenador a la dirigencia y pese al hermetismo que mantienen ambas partes se filtraron tres nombres, el argentino Carlos Matheu y los paraguayos Juan Patiño y Junior Alonso. La llegada de un nuevo jugador en ese sector del campo habilitará la partida de cuatro hombres hoy disponibles: Torsiglieri, Burgos, Gissi y Menosse. Seguramente no se los extrañará por Arroyito. El único que tiene su lugar garantizado es Javier Pinola, de quien se espera su regreso a mediados de febrero.
No hacía falta, ya había quedado claro, pero la dolorosa final ‑ para el canaya ‑ de la Copa Argentina volvió a demostrarlo. Central perdió puntos clave por groseros yerros defensivos. Se equivocó el ex entrenador en el mercado de pases y pese a haber llegada muy lejos en el certamen copero las falencias nunca se saldaron. El puesto 22 en un torneo de 30 equipos es un poco mentiroso para el elenco auriazul en virtud de la calidad que tiene en el plantel, superior a la de otros clubes, pero se encuentra en esa posición porque, por un lado, privilegió la copa, pero también porque directamente perdió o igualó partidos por los errores de la última línea.
Montero pidió imperiosamente la llegada de un central. Asomará también el pibe Alfani, que demostró personalidad en la última fecha del año pasado ante Belgrano en Córdoba. Pero es joven y le falta rodaje. El DT uruguayo ya dialogó con el experimentado Matheu y la negociación con los guaraníes no parece sencilla. Se resolverá en los próximos días.