El clima se está enrareciendo; la libertad de información peligra. Lo primero que hizo Carles Torner, director Ejecutivo de PEN Internacional, fue participar de la “Suelta de libros”, que el sábado pasado realizaron editoriales, periodistas culturales, escritoras y escritores para reclamar por los despidos en la agencia nacional de noticias Télam. “PEN Internacional se solidariza con las 357 personas que han sido despedidas. Nos preocupa porque afecta directamente a la calidad y el derecho de la información del pueblo argentino. Por eso nos solidarizamos con los trabajadores y protestamos por este atentado a la libertad de información”, declaró Torner, que encabezará la Reunión de Centros PEN de América Latina, que empezará hoy y concluirá el próximo sábado, junto con Jennifer Clement, presidenta del PEN Internacional, y los delegados de 16 países. Durante el encuentro se analizarán las problemáticas que debilitan la libertad de expresión en la región, los derechos lingüísticos, la importancia de la defensa de la literatura y la protección de las mujeres como lo contempla el Manifiesto de la Mujer, documento histórico del PEN Internacional.
Torner (Barcelona, 1963), poeta, novelista y ensayista, advierte que los problemas de libertad de expresión son diversos según cada contexto. “En México y en Honduras tenemos la tragedia de los tan numerosos asesinatos de periodistas, que es un círculo que no sabemos cómo parar, que empieza con la corrupción denunciada a través del periodismo de investigación, que genera represión, violencia y crímenes contra periodistas. Como esos crímenes están impunes, la impunidad genera más represión y más violencia contra lo que es el buen periodismo de investigación que hacen los profesionales de esos países –plantea el director Ejecutivo de PEN Internacional a PáginaI12–. Desde hace mucho tiempo la represión del régimen de libertades y la libertad de expresión en Venezuela es muy preocupante. Vemos en diversidad de países cómo el clima se va enrareciendo y cómo hay muchos canales por los cuales se limita esa libertad de expresión, que tiene muchas caras, como por ejemplo, la de la libertad de información. En Argentina se está limitando el derecho a la información y en Nicaragua, desde que Daniel Ortega es presidente, ha habido un control absoluto de la información y la población y los periodistas no han podido hacer su trabajo como es debido. En Nicaragua hay todo tipo de ataques: difamación a los periodistas, robo de equipos a medios cuando están filmando y cuando están entrevistando, hay violencia directa, hay secuestros de periodistas”.
La Reunión de Centros PEN –organizada por el Centro PEN Argentina que preside la escritora Luisa Valenzuela, el PEN Internacional y el ministerio de Cultura de la Ciudad– se realizará en la Dirección General del Libro, Bibliotecas y Promoción de la Lectura (Talcahuano 1261) y en la Casa de la Lectura (Lavalleja 924). Entre las actividades abiertas al público se destacan “La libertad de expresión en tiempos de protesta” (mañana a las 16, Talcahuano 1261), con Milagros Socorro (Venezuela) Tania Ortega (Nicaragua), Jorge Miralda (Honduras) y Jorge Ragal (Chile). También se presentará el informe “Venezuela: la censura pública y privada”. También mañana, pero a las 18.30, se debatirá sobre “PEN y las mujeres”, con Jennifer Clement (PEN Internacional), Luisa Valenzuela (Argentina), Kettly Mars (Haití), María Ramos Rosado (Puerto Rico), con la moderación de Irene Chikiar Bauer, Comité de Mujeres de PEN Argentina. El viernes a las 16 llegará el turno de un panel sobre “Derechos lingüísticos”, con Kettly Mars (Haití), Melita del Carpio (Bolivia), Juan Antonio Canel (Guatemala) y Carles Torner. A las 18.30, Nina Jaramillo presentará el Comité de Idiomas Indígenas “Carlos Martínez Sarasola” y luego se podrá disfrutar del canto mapuche de Carina Carriqueo. El sábado el encuentro se mudará a la Casa de la Lectura (Lavalleja 924). A las 17.30, comenzará una lectura con los participantes del encuentro.
Para el director Ejecutivo de PEN Internacional hay una falta de intercambio en la literatura de los distintos países de América Latina. “Queremos crear una red de intercambios, que se faciliten los debates, las conversaciones literarias entre autores de los distintos países de la región -subraya Torner-. El otro gran tema es la traducción; asegurar que los autores de todo el continente puedan entrar en el mercado internacional de la traducción y alimentarse del diálogo con otras literaturas. Este encuentro va a poner un acento muy importante en la promoción de todas las literaturas del continente, de todas las lenguas indígenas, el mapudungun, el quechua, el aimara, las distintas lenguas mayas, el náhuatl… Los escritores en lenguas indígenas tienen que participar de la gran conversación literaria de América Latina”. Luisa Valenzuela, recién llegada de la Universidad de Salamanca (España), donde pronunció la conferencia “El lenguaje y su potencia de fuego”, en el marco del 56° Congreso Internacional de Americanistas, recuerda que como presidenta del PEN Argentina apoya la ley por el aborto legal, seguro y gratuito. “He reflexionado sobre el tema del libre albedrío, como lo remarcó Sor Juana Inés de la Cruz, y me asombra que la iglesia católica no lo recuerde porque el principal mérito del cristianismo es haber reconocido que Dios permite y acepta el libre albedrío –subraya Valenzuela–. Por eso prohibir la ley del aborto es ir en contra del libre albedrío. En cambio permitir la ley es estar a favor del libre albedrío y quienes no quieren abortar o están en contra del aborto pueden hacer su campaña, con la ley aprobada, y pedirle a sus seguidores que no aborten. Pero la libertad de elección es parte de la creencia del cristianismo”.