Faltan poco más de dos meses para las elecciones presidenciales por las cuales los seguidores de Lula da Silva empezarán una huelga para exigir su excarcelación a fin de que pueda hacer campaña. Luiz Inácio Lula da Silva y Jair Bolsonaro son los políticos mejor ubicados en las encuestas con vistas a los comicios del 7 de octubre.
El Movimiento de los Trabajadores Sin Tierra (MST) anunció que miembros de esa organización realizarán una huelga de hambre en solidaridad con Lula da Silva, expresidente y líder del Partido de los Trabajadores (PT).La huelga empezará “esta misma semana” y ya hay al menos “ocho voluntarios” registrados, quienes solo beberán agua “por tiempo indeterminado” para exigir la puesta en libertad del exmandatario, señalaron fuentes de la organización. “Será una huelga de hambre” en un “lugar público de gran visibilidad” en Brasilia “y sin alimentos sólidos, solo agua y nada más. Un médico acompañará a los voluntarios para evitar riesgos mayores”, indicaron las citadas fuentes. Los activistas del MST y otras organizaciones campesinas realizarán esa medida “extrema” para exigir la libertad de Lula para que pueda hacer proselitismo.
El exgobernante está arrestado en la Superintendencia de la Policía Federal en Curitiba desde el 7 de abril para cumplir una condena de 12 años y un mes por corrupción pasiva y lavado de dinero en la causa Lava Jato. “Lula es un preso político y cualquier impedimento a su candidatura configura una medida autoritaria contra la soberanía popular”, afirmó ayer Jaime Amorim, dirigente del MST. El MST y el PT montaron en Curitiba un campamento en el que realizan una “vigilia” hasta que Lula recupere la libertad.
