Tres grandes cadenas de supermercados abrieron sus puertas ayer, gracias al fallo judicial que invalidó la ley de descanso dominical, pero con una respuesta dispar por parte del público consumidor. La reapertura no contó con el aval de "una gran mayoría de trabajadores más antiguos" que ejercieron su derecho y no concurrieron a sus lugares de trabajo. Lo reveló la Asociación Empleados de Comercio, que siguió bien de cerca el movimiento de toda la jornada de ayer y observó que los locales de grandes superficies permanecieron "prácticamente vacíos". La Secretaría de Comercio Interior hizo constataciones sobre la actividad y en las próximas horas resolverá si aplicará sanciones o no, dado que la ley sigue vigente. En tanto, los almaceneros lamentaron la resolución de la Justicia que benefició a los hipermercados ya que gracias a la vigencia desde mediados de año de la ley que obligaba a cerrar a los establecimientos con más de 1200 metros cuadrados de superficie, habían logrado un aumento del 30 por ciento en las ventas.
La semana fue larguísima. Las firmas Coto, Carrefour y Jumbo comunicaron que abrirían sus puertas en el día de ayer, el sindicato les opuso resistencia y el gobierno provincial prometió que los multaría. La disputa, mientras otras cadenas como La Reina y Libertad buscan seguir el paso de la reapertura, continuará en la Justicia, donde deberá expedirse la Corte Suprema, según la entidad mercantil. El sindicato se aferra a que la medida sea declarada constitucional de una vez por todas, tal como lo aprobaron senadores y diputados y rubricó mediante su adhesión el Concejo rosarino. "Somos respetuosos de la Justicia, pero no nos olvidamos de que hubo una ley que nos devolvió un poco de dignidad a los trabajadores mercantiles, un derecho histórico", razonó Agustín Galeano, delegado del gremio en Coto.
Miembros de Empleados de Comercio recorrieron ayer los supermercados abiertos y, pese a las incontables ofertas con las que las cadenas procuraron seducir a los clientes, comprobó que el movimiento fue menor, para nada considerable. Por ese motivo, continuarán con una campaña de volanteada en la puerta de los comercios con el objetivo de "concientizar a los clientes para que no compren los días domingo". Para Galeano, la medida de protesta tuvo un efecto positivo porque se sintieron "bastante acompañados por la gente". A la vez, recibieron quejas de empleados que se sintieron presionados por la patronal para concurrir a trabajar los domingos desde ahora en adelante.
"A pesar de las amenazas de despidos y aprietes, los compañeros más antiguos respondieron en no ir a trabajar, los que estuvieron trabajando son compañeros que tomaron para cubrir vacaciones", aseguró el delegado gremial a Rosario/12 y confió que si a alguna empresa se le ocurre sancionar, suspender o directamente despedir a al menos un trabajador que decida por motus propio no ir a trabajar, el gremio mercantil "tomará medidas firmes contra ese supermercado". Por lo pronto -anticipó Galeano-, seguirán con la campaña en los próximos días, realizando asambleas en los lugares de trabajo y "concientizando a los trabajadores que tienen todo el derecho a no concurrir el domingo".
Ahora seguirán buscando por vía judicial otras cadenas como La Reina y Libertad para poder abrir los domingos.
El Centro Unión de Almaceneros de Rosario prendió una luz de alerta por lo que pueda significar una merma en las ventas del sector, que gracias a la ley se había incrementado, para el caso de los almacenes y granjas cercanos a hipermercados, un 30 por ciento promedio y un 50 en algunos casos, "dependiendo de la distancia o amplitud horaria". Lo describió así Juan Milito, el titular de la entidad: "Ya estamos muy golpeados ante lo que fue la crisis de todo el 2016, que impactó fuertemente en nuestros negocios, con un 20 por ciento de caída entre los boulevares y un 30 en la zona periférica". El Centro acompañará el reclamo de los "compañeros" del sindicato mercantil porque el descanso dominical "democratiza la venta".
"Es un paso atrás en la conquista de los trabajadores y los sectores Pyme que nosotros representamos. El fallo fue un mamarracho porque no se estaba legislando sobre el trabajo, solo sobre apertura y cierre, pero es la visión del sector de los poderosos, cerró Milito.
En tanto, el secretario de Comercio Interior y Servicios, Juan Pablo Diab, confirmó que el gobierno provincial realizó, mediante la tarea de inspectores, constataciones de la apertura de las sucursales de Coto, Carrefour y Jumbo y que en los próximos días evaluará si merecen imputaciones por tal caso. Por otro lado, el Ejecutivo aguarda que la Justicia se expida esta semana sobre la admisibilidad de la apelación al fallo favorable a las empresas que efectuara el gobierno santafesino.