Tres localidades de General Villegas, en el noroeste bonaerense, se inundaron ayer a la madrugada tras registrarse intensas lluvias que ocasionaron evacuados y cortaron los caminos de acceso.

Se trata de Piedritas, Santa Eleodora y Santa Regina, pueblos que ya tenían complicaciones en los cascos urbanos y los campos por las lluvias acumuladas desde octubre último.

En Santa Eleodora, de 250 habitantes, el delegado municipal Pedro Rapalino, explicó: “Tenemos algunos evacuados y todos los caminos cortados, estamos aislados; de tres caminos, nos quedaba uno sin cortar y esta lluvia lo llenó de agua”. Graficó que “recién quiso entrar un camión municipal y el agua tapaba las ruedas” y agregó que “los desagües y los pozos colapsaron, todo está saturado”. En Santa Regina, que carece de cloacas, los pozos ciegos están desbordados y en medio de la tormenta un rayo dejó sin electricidad a parte del pueblo, que tiene todos los caminos intransitables. En Piedritas, el delegado municipal José María García contó que “se derrumbó una contención que teníamos y empezó a entrar agua al pueblo”. General Villegas está afectado desde octubre último, por la acumulación de lluvias y agua que ingresa de otras provincias.

En tanto, un temporal de lluvia y ráfagas de viento de más de 100 kilómetros ocasionó la voladura de techos, árboles y postes de alumbrado y dejó sin electricidad a más de la mitad de la ciudad de Vedia, en el noroeste bonaerense. Sergio Barbera, bombero voluntario, explicó que “teníamos una alerta por lluvia pero no esperábamos algo así, con vientos de más de 100 kilómetros que cruzaron todo Vedia y arrancaron de raíz pinos enteros”. El fenómeno comenzó a las 21.40, duró pocos minutos pero hizo desastres, voló los techos de unas 13 casas, arrancó árboles y provocó la caída de postes de alumbrado, lo que dejó sin electricidad al 60 por ciento de la ciudad.

Además, cuatro rutas de Santa Fe continuaban ayer con el tránsito interrumpido por presencia de agua en la calzada, entre ellas el tramo de la autopista Santa Fe-Rosario que une las localidades de Arocena y Coronda, luego de un inicio de año con lluvias de gran intensidad. El Servicio Meteorológico Nacional emitió ayer un alerta de lluvias y tormentas aisladas que, entre otras regiones del país, podrían afectar al centro y sur de la provincia. El informe advierte sobre la posibilidad de “lluvias y tormentas aisladas, algunas de intensidad fuerte con abundante caída de agua en cortos períodos, fuerte actividad eléctrica, ráfagas y ocasional caída de granizo con mejoramientos temporarios”.

Además, la Agencia Provincial de Seguridad Vial mantenía cortada totalmente en ambas manos la autopista Rosario-Santa Fe por la acumulación de agua en la calzada por el desborde del arroyo Colastiné, a la altura del kilómetro 103, con desvíos hacia la ruta nacional 11.

El último corte informado por la agencia gubernamental es en la vieja ruta nacional 9, en la intersección con la ruta provincial 15, en la localidad de Armstrong, donde el tránsito fue interrumpido por un descalce del puente sobre el río Las Tortugas, con desvío hacia la autopista Rosario-Córdoba.