La Justicia aceptó que la principal testigo del homicidio de Jonathan Funes declare antes de llegar a juicio, ya que está amenazada. Así lo solicitó el fiscal Ademar Bianchini (foto), que investiga el crimen de uno de los hermanos Funes –-sindicados por hechos de violencia y homicidios, en barrio Municipal--, perpetrado en febrero pasado, cuando el muchacho salía de visitar a sus hermanos presos en Piñero. La jueza María Chiabrera hizo lugar al pedido y resta poner fecha a la audiencia para que la muchacha que viajaba en el asiento del acompañante, aquella siesta, cuente lo que vio. En la causa están imputados Adrián “Cable” Solís y Damián Chávez –este último en domiciliaria-; mientras que continúa prófugo el presunto tirador, apodado “Jija”.

“Bam Bam” Funes, de 28 años, fue asesinado el lunes 5 de febrero de 2018 en zona de ruta 14 y A012, cuando pasado el mediodía circulaba junto a una amiga a bordo de su automóvil y fue interceptado por una camioneta Ford Eco Sport. Uno de los ocupantes bajó y le disparó hasta la muerte. Para el fiscal Miguel Moreno fue un “plan criminal”.

“Te dejo viva para que cuentes qué pasó”, le dijeron a la testigo principal, que dos meses después fue detenida como parte de la banda de Los Funes. Si bien está presa, el fiscal recordó que teme perder el testimonio si algo le sucede, ya que estuvo dentro del programa de protección, del que salió voluntariamente antes de caer presa. Además, sufrió amenazas “el día del hecho y al día siguiente”, aseguraron sobre la necesidad de asegurar su declaración ante un juez para que sirva como prueba al momento del juicio.