El presidente de la Empresa Provincial de la Energía, Maximiliano Negri, tomó distancia de la polémica desatada la semana pasada a partir de la filtración de los sueldos de los directores de la distribuidora eléctrica, que superaban hasta el del gobernador. En cambio, eligió presenciar el desembarco del programa Luz Segura en Nuevo Alberdi Oeste.
Se trata de la regularización del servicio eléctrico en zonas donde predominan las conexiones clandestinas. La obra consiste en el tendido de redes de media y baja tensión con cable preensamblado, y el montaje de subestaciones transformadoras para el sector delimitado entre las calles Joaquín Suárez, Baigorria, Luzuriaga y Bouchard, en el extremo noroeste de Rosario. El programa se encuadra dentro del Plan Abre, del Ejecutivo provincial.
La extensión del plan en ese barrio prevé la conexión regular de 500 medidores domiciliarios. Previo relevamiento de trabajadorsa sociales, reemplazan las conexiones irregulares a la red aérea por instalaciones seguras, con acometidas domiciliarias adecuadas y llave térmica exterior, precisaron voceros de la compañía estatal.
"A cambio de una tarifa social accesible, cada familia puede hacer uso de la energía en cantidad suficiente para sus necesidades domésticas, manteniendo parámetros de consumo responsable y contenida dentro de los derechos que le asisten a los clientes", dijo Neri.
