El juez Pablo Pullen Llermanos ordenó el traslado de Milagro Sala al Penal Federal de Salta. La notificación se conoció anoche y fue calificada por la defensa de la dirigente social como “una medida absolutamente arbitraria” y contraria a lo dispuesto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos y ratificado por la Corte Suprema de Justicia: ambas instancias judiciales habían ordenado la detención domiciliaria de Sala en su residencia habitual, en el barrio de Cuyaya. La defensa presentará un habeas corpus en favor de la dirigente social. “La quieren muerta”, denunciaron desde el Comité por la Libertad de Milagro Sala. “El gobernador Morales y el Juez Pullen Llermanos continúan con su política constante de hostigamiento contra Milagro. Cada vez queda más en claro que no les interesa en lo más mínimo su vida.”