Desde Santa Fe

 

 Un grupo antiderechos atacó a puñetazos, cachiporras y dentelladas a militantes feministas, en su mayoría jóvenes de escuelas secundarias, que se habían manifestado con sus pañuelos verdes en las puertas de la Catedral Metropolitana. El acto se desarrolló sin incidentes durante una hora frente a la iglesia, pero cuando las manifestantes se cruzaron hasta la plaza de Mayo, a metros de la Casa Gris, para colgar telas verdes en los árboles, el grupo que había operado como guardia pretoriana de la Catedral, junto a la Policía santafesina, las persiguió y descargó su furia. Los videos que se viralizaron muestran a un sujeto de barba y gorra negra que le pega a un chico que defiende a sus compañeras, a un pelado de bigotes que agarra a cachetadas a una jovencita y a otro de gorra amarilla y pantalón militar que agita su pañuelo celeste. “Los tres están identificados, son fachos del partido Bandera Vecinal” que responde a Alejandro Biondini, reveló Jimena Sosa, referente de “Juntas y a la Izquierda”, la organización que había convocado a la marcha y denunció el ataque ante la justicia y la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia. La causa quedó a cargo del fiscal de turno, Roberto Apullán, quien ya solicitó los videos de las cámaras de vigilancia de la zona para identificar a los agresores.

La profesora Sosa dijo que una las chicas agredida es menor de edad. Y después del ataque, siguió una persecución contra ella y sus compañeras. “Recibí llamadas y amenazas por Whatsaap”, que la advertían: “¡Cuidate, abortera! ¡Te vamos a buscar”. “Incluso a una compañera secundaria, cuando bajó del colectivo y caminaba hacia su casa, la interceptaron dos personas antiderecho y la empujaron. Hay una persecución de estos sectores reaccionarios que se quedan sin argumentos y se ponen muy violentos”, dijo la docente. 

El pañuelazo –recordó Sosa- se realizó de manera pacífica, entre las 16.30 y 17.30, frente a la Catedral, donde cantaron sus consignas. En la convocatoria predominaban los secundarios que “son los que más movilizan en defensa de sus derechos”. La Iglesia era custodiada por policías santafesinos, que interactuaban con el grupo de violentos que luego las atacó.

Esa afinidad quedó a la vista después cuando los atacantes operaron “con total impunidad”, “lo que da cuenta de la complicidad con este sector bancado por la Iglesia”, contó Sosa por la emisora Solar de Radio. “Tenían el amparo de la policía. Era impresionante la pasividad de la policía, no movían un dedo”.  “Fue terrible como estos cuatro tipos accionaron contra estudiantes secundarios que se manifestaban”, agregó Jimena. “No queremos que esto quede impune”.

“Recibí llamadas y amenazas por Whatsaap”, y le advertían: “¡Cuidate, abortera! ¡Te vamos a buscar”.

La represalia a las militantes feministas generó una ola de repudios en los organismos de derechos humanos y expresiones políticas y sindicales. El Foro contra la Impunidad y por la Justicia –que nuclea a Madres de Plaza de Mayo, Hijos y Familiares de Desaparecidos- advirtió que ese “grupo violento” que operó en la plaza de Mayo  responde a la “agrupación Bandera Vecinal” y es el mismo que ya “ha protagonizado de manera reiterada, y con diferentes modalidades, hechos que reivindican la xenofobia, el nazismo y las prácticas genocidas”.

Basta de “quienes atentan contra la participación democrática” y  quieren “instalar la persecución, la intolerancia y el miedo que nos remiten a tiempos dolorosos para nuestro pueblo”, dijo el Foro. “Queremos una democracia que destierre definitivamente la violencia en todas sus formas”.

Unidad Ciudadana de Santa Fe también responsabilizó por el ataque “a la organización neo nazi Bandera Vecinal”. “Afuera los neonazis de Santa Fe”. Y reclamó la “inmediata intervención del Estado santafesino ante estos hechos violentos que pusieron en peligro la integridad física de compañeras y compañeros que se manifestaban en forma pacífica para país igualitario y libre”.

Sería “inadmisible que este hecho de suma gravedad democrática quede” impune. Hay pruebas (videos y fotografías) para identificar a los violentos que levantan la bandera del nazismo en Santa Fe”, a quienes llama “predicadores del odio y el oscurantismo” que “deben ser sancionados con todo el peso de la ley vigente”.