Hernán Lombardi pasó esta tarde por la Comisión de Sistemas, Medios de Comunicación y Libertad de Expresión de la Cámara alta y repitió los mismos argumentos expuestos hace un mes en Diputados para justificar los 357 despidos producidos en Télam hace casi dos meses. A su lado, el titular de la agencia estatal, Rodolfo Pousá, repitió el discurso del responsable del Sistemas de Medios Públicos.
Antes los senadores, Lombardi dijo que “no hubo un sesgo ideológico” en los despidos del 26 de junio y denunció “un ambiente de fuerte hostilidad y amenazas” de parte de los trabajadores que ocupan las instalaciones de los dos edificios de la agencia, paralizada desde el comienzo del conflicto. Además, argumentó que los despedidos cobraban un salario bruto promedio de 46 mil pesos, cuando en sus anteriores intervenciones había dicho que los sueldos eran de 55 mil pesos.
A su turno, Pousá insistió en que se trataba de una “estructura sobredimensionada que hipotecó el futuro de la agencia” e hizo inevitable los despidos, que abarcan a un 40 por ciento de los trabajadores de planta e incluyen el cierre de varias corresponsalías.
Lombardi, quien antes de comenzar su intervención pidió que se retiraran de las sillas del salón donde se realizó la audiencia los carteles con la consigna “No a los despidos en Télam”, también pidió, con el apoyo de los senadores de Cambiemos, que no ingresaran los delegados de la agencia, moción que fue rechazada por los integrantes de la comisión convocante.
A pesar de que Lombardi manifestó que se respetarán los fallos del Poder Judicial, una de cuyas cautelares ordenó la reincorporación de cinco despedidos, los afectados todavía no recibieron la notificación para volver a sus puestos de trabajo y Télam debe abonar 5 mil pesos diarios (mil por cada trabajador) por el incumplimiento de la resolución.