La Empresa Provincial de la Energía (EPE) realizó ayer un operativo antifraude en el norte de Rosario, para verificar la correcta medición de la energía suministrada, objetivo planteado por su directorio para disminuir “las pérdidas no técnicas”. En las tareas, desarrolladas en zona de Superí y Molina, personal del área control utilizó una nueva tecnología denominada “barioscopio”, para auditar el interior de los caños de las conexiones domiciliarias. Este equipamiento permite verificar que no existan conexiones clandestinas ocultas y contrasta el funcionamiento de los medidores con instrumentos patrones de uso en calle, para evitar el desarme del medidor y detectar el mal funcionamiento del mismo. El presidente de la EPE, Maximiliano Neri, afirmó: “Tenemos que hacer una empresa más eficiente entre todos”. E insistió “sobre la trascendencia que la gente nos acompañe, aportando información”. Neri recordó que “cuando se encuentra un domicilio con una conexión directa, además de la sanción económica, el propietario podría afrontar una denuncia ante el Ministerio Público de la Acusación y las consecuencias legales del proceso”.