Desde el 1º de agosto, la humanidad vive a crédito: apenas 7 meses le ha llevado consumir la totalidad de recursos renovables del año. Así lo informa, con justificada preocupación, la organización Global Footprint Network, que hace el cálculo tomando en cuenta la huella carbono, la pesca, la ganadería, los cultivos, la construcción, la utilización del agua. En paralelo, el calentamiento global sigue escalando, y las consecuencias saltan a la vista: incendios forestales en Grecia, Europa sumida en ola de calor, al igual que Japón, con registros récord y decenas de muertxs… Y aunque hay buenas nuevas para el medioambiente (la mal reputada Monsanto recibió certero embiste: perdió el primer juicio por herbicida de glifosato en Estados Unidos), el uso y abuso de agrotóxicos o la deforestación (el caso argentino, en ese sentido, es crítico) hacen sonar la chicharra de peligro internacional a cada rato. Apenas algunas postales que pintan un panorama siniestro, en el que se vuelve especialmente relevante la flamante iniciativa de Mary Robinson, antaño primera presidenta mujer de Irlanda, hoy comprometida activista con la causa ecológica.
Amén de generar conciencia y, a la par, esperanza, Robinson ha lanzado el podcast Mothers of Invention, donde conversa con algunas de las mujeres que están liderando la lucha contra el cambio climático con propuestas concretas y efectivas, a diario: científicas en África, agricultoras en Asia, políticas en Bruselas, líderes de comunidades indígenas en América, abogadas, activistas… “El cambio climático es un problema originado por el hombre que requiere una solución feminista”, arenga MR, a sabiendas de que las mujeres sufren en mayor grado las consecuencias del climate change. Ya lo señalaba Leila Rhiwi, de ONU Mujeres del Magreb, tiempo atrás: “Malas condiciones sanitarias, un acceso desigual a la tierra y la propiedad; o incluso, a un recurso tan esencial como el agua, convierten a la mujer en la primera víctima de cualquier catástrofe climática”.
“Lo que pretendemos es crear un movimiento que crezca orgánicamente a partir de estas mujeres protagonistas y de las mujeres que se unan a la causa. Un movimiento que suceda de manera no estructurada, porque no estamos prescribiendo cómo debería ser una solución feminista: estamos escuchando diversas voces inspiradoras, escuchando lo que las mujeres quieren, necesitan. Y eso, para mí, es infinitamente más interesante”, explica Robinson. Y a modo de petitebio, cabe recordar que, en los 70s, siendo entonces senadora en Irlanda, fue ella quien presentó el primer proyecto de ley para reformar la legislación que prohibía terminantemente la venta de anticonceptivos en el país. En las dos décadas que siguieron, fue una de las voces más prominentes en la campaña que buscó levantar la prohibición constitucional del divorcio (algo que finalmente sucedió en 1995, durante su presidencia). En los 80s, militó sonadamente contra la inserción de una cláusula antiaborto en la Carta Magna. Y poco antes de presentarse como candidata a la presidencia en 1990, llevó al gobierno irlandés a juicio ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos para que las leyes que criminalizaban la homosexualidad en su país fueran anuladas. Y ganó. Desde entonces, fue fichada como Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, devino integrante de The Elders -organización fundada por Nelson Mandela para promover la paz, la igualdad y los derechos humanos a nivel mundial- y es directora de la Mary Robinson Foundation for Climate Justice.
Volviendo a Mothers of Invention, el podcast tiene co conductora: Maeve Higgins, una comediante irlandesa radicada en Nueva York, que contribuye a un tono pretendidamente desestructurado para ahondar en temas escabrosos como el colonialismo, el racismo, la pobreza, la migración, la justicia social, y cómo todo eso se linkea al calentamiento global y a la inequidad de género. En palabras de Mary, “es una forma inusual de presentar tópicos tan sombríos, pero espero que así nuestro mensaje llegue con mayor eficacia que los modelos estándar de comunicación climática; donde el discurso es dominado por los varones, dicho sea de paso”.
En el primer podcast conversa el dúo dinámico con damiselas tan notables como: Marjan Minnesma, directora de la Fundación Urgenda, organización sin fines de lucro que llevó a juicio al gobierno holandés por la falta de políticas adecuadas para limitar la emisión de CO2 y logró una histórica victoria gracias a un fallo sin precedentes: que un tribunal de La Haya ordenara a Holanda reducir sus niveles de contaminación. O bien, con varias chicuelas de Our Children’s Trust: grupo de estudiantes que ha ganado distintas demandas a estados en Estados Unidos, reclamando medidas que preserven el ecosistema para las generaciones de hoy y mañana. En siguientes programas, otras destacadas: la norteamericana Katharine Wilkinson, autora principal de Project Drawdown, “el plan más completo jamás propuesto para revertir el calentamiento global”. Las diseñadoras industriales Chelsea Briganti y Leigh Ann Tucker, de la firma Loliware, que usa materiales sustentables (y comestibles) en productos comúnmente hechos de plástico como sorbetes y vasos. La eminencia ecofeminista Vandana Shiva, que aboga por la biodiversidad contra la monopolización de recursos, y es una de las mujeres -según revista Time- más influyentes del mundo, defensora de la soberanía alimentaria, protectora de semillas. Por mencionar unas pocas entrevistadas, muchachas indispensables de Perú, Kenia, Francia, Sudáfrica, Puerto Rico, Tanzania...