El presidente venezolano, Nicolás Maduro, acusó a la oposición de intentar darle un golpe de Estado al declararlo en el Parlamento en “abandono del cargo”, y le advirtió que por ello debe asumir las consecuencias. “Aténganse a las consecuencias del llamado al golpe de Estado que la pandilla aprobó ayer en la Asamblea Nacional”, el mandatario al activar ayer un “comando antigolpe” integrado por figuras que se autoproclaman chavistas radicales.
En su primera reacción al acto legislativo del lunes, el mandatario afirmó que es un “manifiesto golpista, inválido, nulo, que autoriza, entre comillas, para que se haga lo que sea, intervenir Venezuela, atentados terroristas contra nuestro país”. Además -agregó- incita a la violencia y da vía libre para sacarlo del poder por cualquier medio, incluida una intervención extranjera.
“Soy el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, el jefe de gobierno y el jefe de Estado por mandato del pueblo, y con el pueblo seguiré defendiendo la paz”, dijo Maduro, quien ayer cumplió cuatro años en el poder. Luego llamó a la “unión nacional” para “defender” la Carta Magna. En este sentido, el jefe de Estado detalló que el comando antigolpe se juramentó para garantizar la vigencia del orden constitucional y el derecho al “funcionamiento de la economía y de la sociedad”; defender la soberanía nacional y, enfatizó, para “evitar la violencia”,afirmó el líder venezolano en cadena de radio y televisión.
El Legislativo -de mayoría opositora- declaró al gobernante en “abandono del cargo’’ al acusarlo de incumplir sus funciones en medio de una grave crisis política y económica, y exigió la convocatoria a elecciones. “Dicen ellos que abandono de cargo y hay 10 millones de estudiantes”, se defendió Maduro al enumerar una serie de inversiones en sectores como educación, vivienda y salud.
La decisión parlamentaria fue demandada ayer por el oficialismo ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que ya anticipó que la Asamblea no está facultada para destituir al presidente. El recurso pide además enjuiciar penalmente a los congresistas que la aprobaron. El jefe de la bancada, Héctor Rodríguez, pidió que los magistrados juzguen el comportamiento “inconstitucional, antidemocrático e irresponsable de los diputados de la oposición”, y que señale las responsabilidades jurídicas, administrativas, penales y políticas que implica el acto.
En esa línea, Maduro insistió en que la oposición –que arrasó en las elecciones legislativas de diciembre 2015– tiene “secuestrada” a la Asamblea y la utiliza para derrocarlo, por lo que instó al “comando antigolpe” a actuar con “firmeza”. El Comando Nacional Antigolpe, explicó Maduro, atenderá “las arremetidas imperialistas”, la “conspiración oligárquica” y será “el brazo ejecutor de las políticas preventivas para que haya justicia y se castiguen todos los intentos golpistas de desestabilizar a Venezuela”.
“Si sabemos quiénes son los promotores de la violencia, actuemos preventivamente”, exhortó junto a los integrantes de la comisión, anunciada el domingo y en la cual delegó “enteramente la lucha”’ contra las supuestas conspiraciones. Según Maduro, este comando estará encabezado por el vicepresidente Tareck El Aissami y contará con subcomandos en las 24 entidades federales de la nación, con participación de las Fuerzas Armadas, las policías y el Gobierno central. El grupo lo conforman además Diosdado Cabello, número dos del chavismo; Vladimir Padrino López, ministro de Defensa; Néstor Reverol, ministro de Interior; y Gustavo González López, director del Servicio de Inteligencia.