Los 14 túneles de más de 300 metros cada uno que el gobierno porteño planea construir en los barrios de Devoto y Villa del Parque tienen en estado de alerta y movilización a los vecinos de la zona porque denuncian que generan inseguridad debido a los largos tramos que tendrán que caminar bajo tierra, porque no están preparados para que circulen personas en sillas de ruedas, impiden el acceso de las ambulancias y porque cuando llueve hay zonas que son inundables, además de los daños económicos que le ocasionan a los comercios ubicados en esas cuadras y a los 400 árboles que van a sacar.
Si bien los vecinos coinciden en que la iniciativa de eliminar las barreras es una buena medida de seguridad vial para evitar accidentes, están preocupados por las consecuencias colaterales de este proyecto de túneles que es la inseguridad de los peatones. “Es la opción más barata y la más insegura de todas”, denuncian los vecinos de Devoto y de Villa del Parque.
“El túnel es muy engorroso, muy inseguro, te cambia la fisionomía del lugar, no tiene que ver con la idiosincrasia del barrio porque nos divide. Sólo nos podríamos mover por túneles. Tengo dos barreras, quedaría completamente encerrada. Si me quiero mover tres cuadras tengo que ir y bajar por la rampa, subir y bajar escaleras. En nuestra cuadra tenemos tres personas discapacitadas que no podrían moverse de sus casas. Soy médica y sé que complicaría la llegada de las ambulancias porque son cuadras angostas, no son avenidas”, explicó Silvia Solari, vecina del barrio de Devoto.
Los túneles se enmarcan dentro de un megaplan del Gobierno Nacional que es la Red de Expresos Regionales (RER), un sistema que unirá las siete líneas ferroviarias en el área metropolitana, salvo la línea Urquiza, se van a entrelazar y se van a comunicar a su vez con las líneas del metrobús, las líneas de subterráneos y las ciclovías, lo que conectaría a la Ciudad de Buenos Aires, primer y segundo cordón. Un proyecto virtuoso que según el gobierno beneficiaría a más de diez millones de personas. ¿Por qué los vecinos de Devoto y Villa del Parque se oponen a esta política de Estado?
“Las obras que van a hacer son las más baratas y más controvertidas, y las más perjudiciales tanto para los vecinos como para el medio ambiente”, subrayó Mónica Rodríguez, vecina de Villa del Parque y responsable del medio barrial Aquí Villa del Parque. En ese sentido, agregó que los vecinos conocen alternativas superadoras que se hacen en otros barrios de la ciudad y se quejan porque a ellos les proponen “las peores y las más baratas obras”.
“Desde el punto de vista económico no solamente desvalorizan toda la región en sí, sino que van en contra de las pequeñas y medianas empresas que están radicadas en esa área. Principalmente el centro comercial de Villa del Parque, con unos 1500 comercios, y el polo gastronómico de Villa Devoto, pequeño pero con mucho potencial que crece año a año. Se cierran calles, se establecen laberintos, sobre todo en Devoto, una zona cruzada por diagonales y con el trazado de la vía ferroviaria que también complejiza la circulación. Desde el punto de vista social, ya está comprobado que son inseguros, que generan zonas fantasmas, zonas donde nadie circula, nadie quiere circular por ahí”, agregó.
Rodríguez hizo hincapié además que desde el punto de vista ambiental “son un problema porque cuando llueve mucho los túneles se inundan y se cierran” y en ese sentido, precisó que hace más de tres meses el túnel de la avenida San Martín “no sólo se inundó sino que se derrumbó de los dos lados la parte peatonal que aún se puede ver porque todavía está tapeado con madera”.
Si bien ya hay tres túneles construidos en la zona como el de la avenida San Martín, el de Mosconi y el Gustavo Cerati, están sobre la línea del Ferrocarril Urquiza y los que denuncian ahora los vecinos son 14 que se construirán sobre la línea del Ferrocarril San Martín. Los vecinos que se autoconvocaron y comenzaron a movilizarse lo vienen haciendo desde hace casi cuatro años de forma continua. El motivo inicial fue la obra del túnel de Nazca, que aún no está concluida.
“Cuando empezamos con el de Nazca iban a ser once los túneles, ahora son 14. El proyecto va mutando, siempre en detrimento de la población. Es un túnel cada 280 metros. Cuando arrancaron, Rodríguez Larreta nos dijo que hacían el túnel de Nazca y que el resto iba a ser sometido a estudios pero eso no pasó. Si bien cuando lo dicen suena a progreso, a evolución, cuando ya los estás viendo funcionar y ves el impacto que produce en la zona, te das cuenta que no hay una mejora en el tránsito y que encima genera más inseguridad”, explicó Rodríguez.
Otro impacto negativo que denuncian los vecinos de los barrios afectados por los túneles es el que les ocasiona a los comercios de la zona, muchos de los cuales ya bajaron sus persianas.