Tras haber ganado la Copa Suruga Bank en tierras niponas, Independiente no pudo seguir su buena racha en el plano internacional y apenas empató sin goles con el Santos, en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. El equipo de Ariel Holan, que contó con algunas bajas entre lesionados y suspendidos, buscó la victoria, pero los paulistas, que al final sufrieron la expulsión de Dodô, se plantaron bien y se llevaron de Avellaneda un empate que podría resultarles beneficioso para la revancha, que se disputará el próximo martes en Villa Belmiro.
Por la obtención de la Copa Suruga Bank ante el Cerezo Osaka con un ajustado 1-0, el Rojo tuvo su fiesta antes del partido. Ante una multitud presente en el Libertadores de América, apenas matizada por un puñado de simpatizantes del equipo paulista, los futbolistas locales pisaron el césped para encontrarse con viejas glorias que fueron campeones en títulos anteriores, como Bochini, el Chivo Pavoni, Pancho Sa y Pepé Santoro. Fue allí que el capitán Martín Campaña colocó el último trofeo conseguido en Japón en un atril junto a las 18 copas internacionales que el club de Avellaneda tiene en su haber.
El entrenador Ariel Holan debió retocar el once titular, ya que no pudo contar con los lesionados Martín Benítez y Silvio Romero, y tampoco con Alan Franco y Nicolás Figal, que debían cumplir un partido de suspensión.
Enfrente se paró el Santos, que pese a clasificar primero en el Grupo F seguido por Estudiantes, viene complicado en el fútbol local y apenas salió de la zona de descenso el último fin de semana tras golear 3-0 a Recife, donde el DT Cuca recurrió a la mayoría de sus titulares.
El inicio mostró al conjunto brasileño con un intenso despliegue, metiendo mucha presión en la salida y en el mediocampo, por lo que impedía que el local, pese a abrir el juego hacia los costados, prosperara en ofensiva. No obstante, tras un tiro de esquina muy bien ejecutado por Meza, el Puma Gigliotti –que en el debut del Rojo por la Superliga anotó dos goles en el empate ante Newell’s– casi la mete de cabeza. De inmediato, otra vez Meza controló la pelota en dos tiempos y de volea quiso sorprender a Vanderlei, pero el arquero tuvo una gran noche y respondió bien.
Santos tuvo su chance en los pies de Gabigol, pero el chileno Silva se cruzó justo para enviar la pelota al corner. Casi al final de la etapa, una incursión en posición de ataque de Burdisso terminó con un disparo desde fuera del área que salió al lado del poste.
De vuelta de los vestuarios, el chileno Hernández se durmió en una salida y comprometió la última línea roja, pero los delanteros del Santos no aprovecharon el regalito. Aun con poca claridad, Independiente no cejó en su búsqueda por desequilibrar. Lo tuvieron Gigliotti y el uruguayo Silva, pero los paulistas, aun con la expulsión de Dodô, resistieron. Fue 0-0 y en una semana se sabrá cuál de los dos sigue con vida en la Copa.