Los miedos en los niños nos ponen frente a un tema clínico que ya Freud ubica en un determinado momento de la vida como una manifestación corriente. En el caso Juanito se encarga de establecer que se trata de una fobia considerada como síntoma y no del miedo al padre.
Lacan nos dice que la fobia es un puesto de avanzada en relación al miedo y a la angustia. J. A. Miller distingue la angustia freudiana, angustia de castración, de la angustia lacaniana a partir del Seminario 10, donde se da lugar a una clínica del resto, del objeto Laurent advierte que enmarcar la angustia es una tarea fundamental para el psicoanalista, quien tratará de sintomatizar la angustia.
Advertimos que los miedos no siempre son hablados, suelen ser actuados, mostrando un goce deslocalizado que se manifiesta en el cuerpo y esto no sólo en la psicosis y el autismo.
Trataremos de delimitar clínicamente las diversas manifestaciones que llamamos: angustias, miedos, fobias, ataques de pánico, desencadenamientos.
Los miedos siguen siendo en la actualidad motivo de consulta. Padres que no pueden sacar a los niños del lecho matrimonial, maestros preocupados por las fobias escolares, niños que no pueden con sus pesadillas, voces que atormentan.
Cada caso o recorte del que nos serviremos en nuestras reuniones funcionará a la manera de un disparador que nos permita renovar nuestros conceptos y diagnósticos y aventurarnos en la clínica que Lacan ubicó como borromea.
* Psicoanalista. EOL Sección Rosario y AMP. Escrito para el curso Erida 2018.
