La intendenta Mónica Fein recibió ayer a un grupo de organizaciones sociales (en la foto) que solicitaron el encuentro, luego de una masiva movilización que tuvo lugar el 7 de agosto. Hasta la intendencia llegaron integrantes de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie, Corriente Clasista y Combativa y Movimiento Popular San Martín, que solicitaron la declaración de la emergencia alimentaria y en adicciones, la actualización del monto de la Tarjeta Única de Ciudadanía, y la posibilidad de realizar obra pública en los barrios por medio de cooperativas de trabajo.

“Las organizaciones somos las que estamos día a día en el territorio, bancando la parada y peleando contra la pobreza, y por eso vinimos a plantear una agenda de trabajo común con la municipalidad y la provincia, porque la realidad que se vive en las barriadas rosarinas es insostenible, las políticas de ajuste del gobierno de Macri golpean de lleno a los trabajadores formales, pero mucho más a quienes se encuentran en situación de exclusión”, afirmó Ignacio Rico, de la CTEP. Y agregó: “La changa ha desaparecido de los barrios, los comedores escolares y merenderos comunitarios no dan abasto, y vemos que el poxirrán vuelve a ser una posibilidad entre los pibes para engañar el hambre”.

“Lo más urgente es la declaración de la emergencia alimentaria, que ya fue presentada en el Concejo Municipal desde distintos bloques. Nuestros compañeras hacen malabares para llenar las ollas en los comedores pero no alcanza, se necesita un acompañamiento desde el Estado”, sostuvo Rico.

En ese sentido, el dirigente social señaló la importancia de implementar programas de ayuda a instituciones que trabajan con jóvenes con consumo problemático de sustancias. “La crisis agudiza el problema de las adicciones. En paralelo a la desaparición de las changas y el vaciamiento económico, se aumenta el consumo de drogas como vía de escape a una realidad cada vez más asfixiante”, apuntó.

“Destacamos la predisposición de la intendenta, que nos recibió y escuchó nuestros reclamos”, manifestó Rico, quien confió que “Fein coincide en que en los últimos meses, el gobierno de Macri ha profundizado brutalmente su plan de ajuste. La devaluación, la inflación, los tarifazos, los intereses de deuda externa, los despidos y las paritarias a la baja, golpean al conjunto del pueblo argentino, pero en los sectores más postergados, aquellos que no cuentan con un trabajo estable, este ajuste se transforma dolorosamente en más hambre y más exclusión”.

Por su parte, el referente de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Eduardo Delmonte, reafirmó que “el gobierno nacional viene aplicando un ajuste muy brutal sobre las clases populares, sobre los trabajadores, que se irá profundizando con la quita del Fondo Sojero y una serie de medidas que el gobierno viene preparando en las provincias”.

“La idea es articular una reunión de las organizaciones con los tres niveles del Estado, al que se puede sumar la iglesia, para discutir entre todos la realidad social de Rosario, y tomar medidas concretas, respuestas inmediatas”, agregó Delmonte.