Murieron tres pasajeros de un micro de la empresa Rutamar que se despistó y volcó en el cantero central de la ruta 2. El micro iba rumbo a Miramar y el accidente ocurrió a la altura de Vivoratá, partido bonaerense de Mar Chiquita, alrededor de las 7.30 de la mañana. Como el cantero que divide las manos de la ruta está inundado y el vehículo quedó volcado en el agua, se presume que las víctimas murieron ahogadas al no poder salir. Ya se están realizando las autopsias para averiguar la causa de las muertes.

Las víctimas fatales son Santiago Ayerzi, de 16 años, oriundo de Santa Clara del Mar; Víctor Obregón, de 37 años, que vivía en La Matanza, y otro hombre, de aproximadamente 55 años, que todavía no fue identificado, ya que en las sucesivas paradas que hizo el micro hubo recambio de pasajeros. 

La Policía Vial de Camet indicó que los 22 pasajeros restantes del micro de la empresa Rutamar, al igual que los dos choferes, resultaron sin heridas de gravedad. Algunos pudieron salir por sus propios medios y otros necesitaron el auxilio de los servicios de emergencia. Algunos fueron derivados al Hospital Interzonal General de Agudos y otros a centros de salud de Vivoratá y Coronel Vidal y luego dados de alta.

En el hecho tomó intervención el fiscal de Mar del Plata, Rodolfo Moure, que informó que el chofer que en ese momento manejaba el micro, Adrián Ravettini, de 44 años, fue demorado y se le secuestró el teléfono celular para peritarlo. Los investigadores verificarán si ésa pudo ser una causa de distracción. También se está tomando declaración a los pasajeros que están en condiciones de hacerlo. “El vuelco se produjo en una zona recta, estaba despejado, con poco viento y el asfalto estaba seco. En el lugar no quedaron huellas de frenadas, sólo el despiste hacia la zanja”, señaló el fiscal. El chofer que iba manejando fue detenido horas después, tras los primeros peritajes, con la acusación de “triple homicidio culposo agravado”.

“No hubo ninguna colisión. Suponemos que hubo un desperfecto mecánico o alguna falla del manejo”, contó Nicolás Marini, secretario de Salud de Mar Chiquita, quien aseguró que “el conductor y su acompañante están sanos”. El funcionario relató que cuando llegaron los bomberos al lugar “muchos pasajeros estaban saliendo por la ventana”. Y sobre las víctimas dijo que habían quedado “sumergidas”.

Norberto Moreno, el delegado de la localidad de Vivoratá explicó algunos detalles. “Al momento del accidente no había lluvia ni niebla, la visibilidad era totalmente normal”, dijo el funcionario desde el lugar.

Las causas por las cuales el micro terminó en la zanja aún no fueron determinadas. En ese sentido, el delegado afirmó que “sobre el asfalto no hay ninguna marca de neumáticos ni indicios de accidente, se puede decir que fue el hombre continuó con la marcha”. “Quizás se quedó dormido”, sentenció Moreno. De acuerdo con las primeras averiguaciones en el lugar del siniestro, no habría existido intervención de un segundo vehículo, por lo cual las hipótesis que manejan los investigadores son que el despiste fue originado por algún desperfecto mecánico o un error en la conducción.