Incorporar o no dirigentes peronistas al armado electoral de la provincia de Buenos Aires sigue siendo tema de debate -y motivo de internas- dentro de Cambiemos. El ex diputado Octavio Frigerio planteó ayer que la coalición oficialista “necesita” del peronismo para “ganar de manera contundente” las próximas elecciones. Las declaraciones del padre del ministro de Interior arrojaron más leña al fuego que inció públicamente en noviembre pasado el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, cuando sostuvo que “el peronismo tiene dirigentes impresionantes que hay que invitar al poder”. Monzó, enfrentado a la gobernadora María Eugenia Vidal y apartado desde entonces de la mesa chica nacional, llegó a cuestionar que “Cambiemos vaya a perdurar”. El contrapunto provino, como era de esperar, desde el riñón mismo de la gobernación de Vidal. “Cambiemos está muy bien”, contestó ayer el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Manuel Mosca, quien viene de inaugurar la mesa del macrismo en la Sexta Sección Electoral junto al ministro de Gobierno bonaerense, Joaquín De la Torre.
“Los tiempos, más allá de que somos un equipo, los irán definiendo la propia gobernadora María Eugenia Vidal, con su jefe de Gabinete, Federico Salvai, y los principales dirigentes de la coalición, tanto del radicalismo como de la Coalición Cívica y FE”, sostuvo Mosca en un intento por señalar cuáles son las voces autorizadas a la hora de trazar la estrategia electoral y de subrayar que el peronismo no parece compatible con el resto de los partidos que integran la mesa macrista en la provincia.
El padre del ministro de Interior se ocupó en aclarar que no está trabajando para “hacer la pata peronista de Cambiemos” sino en una “propuesta que no se superpone” con el armado oficial. “Lo que entiendo es que la base peronista no está representada, o tiene una débil pertenencia al FpV y al Frente Renovador, sin conducción”, opinó, y hasta aventuró “una convergencia con sustento programático” entre un sector del peronismo y Cambiemos. Para el ex diputado, esa es la condición para un “triunfo contundente” en provincia “que el Gobierno necesita” para conseguir “sustento” a futuro.
Mosca fue tajante ayer en contradecir esa posición. “El momento para ampliar no es el año electoral, y ahora necesitamos fortalecernos y consolidarnos en el Gobierno”, definió. En el mismo sentido, De la Torre aseguró ayer que “ampliar la base de sustentación” de Cambiemos “no necesariamente se da con la llegada de nuevos dirigentes”. Sostuvo que “de nada sirve” el pase de peronistas “en circunstancias pre electorales”, porque, dijo, “se dan en torno a negociaciones que muchas veces no están ceñidas por la convicción”. En ese marco, descartó que el macrismo esté “a la caza de intendentes”, dato que comenzó a circular con fuerza en las últimas semanas. “Queremos trabajar en conjunto con los 135 intendentes de la provincia, sin importar el color político”, dijo De La Torre para intentar despejar dudas.