Dos policías del Comando Radioeléctrico se sumarán a los 18 agentes involucrados en la persecución y homicidio de David Campos y Emanuel Medina, en junio de 2017 en zona sur. El fiscal Adrián Spelta los acusará por el delito de encubrimiento, ya que entiende que tras llegar en el móvil a la zona de Callao y Arijón, Rosa D. y Pablo G. cometieron el delito de encubrimiento al omitir informar sobre la situación irregular por la que sindicó a otro grupo de efectivos que firmaron el acta con datos falsos para fraguar un enfrentamiento. El fiscal adelantó que luego de esas imputaciones, a fines de setiembre estará en condiciones de presentar acusación formal para llevar a los acusados a juicio.

Los que deberán responder por el doble homicidio y enfrentar un pedido de pena de prisión perpetua son dos policías cuyos proyectiles fueron encontrados en los cuerpos de las víctimas: Alejandro Bustos y Leonel Mendoza, señalados como autores materiales del crimen de los amigos de 28 y 32 años.

Así, serán veinte los policías juzgados en el caso. La mayoría de ellos, que fueron detenidos hace casi un año, está ligado al proceso en libertad; y cuatro permanecen en arresto domiciliario, por “adulterar la escena” del hecho, falsear el acta y encubrir a los principales acusados.

La audiencia que estaba programada para la mañana de ayer debió ser suspendida ante la falta de la agente D., que estaba de viaje. Así, el juez Hernán Postma resolvió un cuarto intermedio hasta el próximo miércoles. Los familiares de las víctimas, que se movilizaron en la puerta del Centro de Justicia Penal, se fueron decepcionados por la suspensión y lamentaron la falta de organización para la citación de los acusados.

Según las pruebas con las que cuenta Spelta para las nuevas imputaciones, tras los 28 minutos de persecución al VW Up! en el que circulaban los pibes hasta que terminaron contra un árbol y baleados, el móvil del Comando Radioeléctrico en el que viajaban los dos nuevos agentes involucrados llegó en quinto lugar a la escena del hecho, unos 30 segundos después que Bustos, el primer tirador. Sin embargo, los acusados intentaron eludir la situación y se fueron diez minutos después, por lo que no figuran en la  firma del acta.