Una mujer de 67 años se presentó en el Ministerio Público de la Defensa (MPD) para denunciar que hacía tres meses que no le entregaban la medicación que debe tomar de por vida por ser trasplantada de médula a raíz de un mieloma múltiple. Su denuncia dejó a la vista un problema de proporciones y de consecuencias potencialmente gravísimas: la interrupción en la entrega de medicación oncológica. El MPD libró un oficio al Ministerio de Salud de la Ciudad pidiendo informes sobre la situación. El organismo admitió los faltantes en tratamientos para el cáncer y responsabilizó al ministerio nacional.
“Llevo seis años como defensora oficial y estoy en el Poder Judicial desde el 2003 y nunca tuve un caso como éste. Es la primera vez que debo iniciar una acción por faltantes de medicamentos oncológicos”, explicó a este diario la doctora Cecilia González de los Santos, titular de la Defensoría 4.
De los Santos presentó un amparo judicial y el titular del juzgado nº 13 en lo Contencioso Administrativo y Tributario, Guillermo Scheibler, hizo lugar a la medida cautelar y ordenó al Gobierno de la Ciudad que, en el término de dos días, provea a la mujer de la medicación solicitada o le brinde los fondos necesarios para comprarla, ya que en su condición de discapacitada y desempleada no podía afrontar el gasto. El precio del remedio oscila entre los 250.000 y los 370.000 pesos por 21 comprimidos, según el laboratorio que lo fabrique. La resolución fue acatada y la mujer recibió el medicamento.
Como empezaron a multiplicarse las consultas sobre el tema, la defensora cursó el 13 de agosto un pedido de acceso a la información pública al Ministerio de Salud porteño para conocer el listado completo de medicamentos oncológicos proporcionados a los pacientes que se atienden en hospitales públicos de la Ciudad y cuya entrega, actualmente, fue suspendida. Además quiso saber cuáles fueron las medidas adoptadas por el ministerio a fin de “garantizar el goce irrestricto del derecho a la salud”. “Esta decisión intempestiva los coloca en un estado de extrema gravedad, poniendo en riesgo su propia vida y vulnerando derechos fundamentales”, aseguró la defensora.
Según explicaron desde el Ministerio de Salud, “los tratamientos oncológicos a pacientes que se atienden en hospitales públicos en la CABA se están adquiriendo a través de un proceso licitatorio”, que se estima estará concluido a partir de los primeros días de septiembre. Y comunicaron que, mientras se licitan remedios que no se daban antes en Ciudad, se están adoptando algunas medidas como la “compra centralizada para satisfacer la demanda cotidiana previo a la efectivización de licitación” y “la comunicación a efectores sobre la situación de referencia”.
Por otra parte, señalaron que los remedios no incluidos en el vademécum del Banco de Drogas Oncológicas (BDO) y fuera del catálogo de la administración porteña, serán inicialmente solicitados a la Dirección de Asistencia Directa para Situaciones Especiales (DADSE), dependiente del Ministerio de Salud de la Nación. Además, proporcionaron la lista de medicación contenida en el vademécum del BDO de la que no cuentan con stock disponible (aunque aclararon que “no se informó que se va a dejar de proveer dicha medicación”, es decir, no hubo notificación previa por parte de Nación sobre la interrupción en las entregas).
Ante la falta de precisión en la respuesta ministerial, De los Santos envió un oficio a todos los hospitales públicos porteños para que informen, entre otros puntos: la cantidad de pacientes oncológicos que se atiende en cada nosocomio; la cantidad de pedidos de medicación oncológica recibidos desde marzo; el listado de medicación de este tipo que habitualmente se entregaba y la fecha desde la que no se encuentra disponible; el listado de cualquier otro tipo de medicación que no se está suministrando; y si se tiene conocimiento de pacientes que tengan su tratamiento suspendido por falta de medicación. Según le contó a este diario, “sólo recibimos respuesta del Tobar García y del Moyano. Desde el neuropsiquiátrico infantil contestaron que estaba en falta una droga, pero que les era fácilmente reemplazable. Y del Moyano nos dijeron que no tenían problemas con la medicación. Veremos en los próximos días cuando lleguen las respuestas de los demás hospitales. Porque lo que aparecieron fueron dos casos de faltantes de prótesis, que ya estamos reclamando”. “La Ciudad está preparando un esquema que resuelva esto, pero está teniendo que enfrentar una interrupción intempestiva por parte de Nación”, dijo la defensora.
De los Santos insistió en que aquellos pacientes que ven interrumpidos sus tratamientos por falta de entregas de medicación en hospitales porteños pueden dirigirse al MDP de la Ciudad (Av. De Mayo 654), donde los casos vinculados con la salud se tratan en el momento. “La gente que no sabe que existimos no sabe adónde ir cuando le pasa esto. La mujer (que dio lugar al amparo) apareció acá con su marido porque escuchó a otra en el hospital que decía que iba a iniciar un amparo”, señaló De los Santos, y agregó la importancia de “que los médicos sepan que si sus pacientes tienen interrumpidas sus medicaciones pueden mandarlos a la Defensoría”.
La confirmación de las faltantes en las entregas de medicamentos oncológicos en los hospitales públicos porteños por el corte de suministro de Nación se da a pocos días de que la cartera que conduce Adolfo Rubinstein reconociera que el Gobierno nacional suspendió “por tiempo indeterminado la dosis de los 11 años de la vacuna contra la meningitis” y al día siguiente del anuncio de los prestadores del servicio de diálisis de que no aceptarán nuevos pacientes porque el Gobierno no les paga desde marzo.