El Ministerio de Fomento de España decidió convocar a la aerolínea lowcost Ryanair a una reunión después de que la firma anunciase que cobrará por subir a bordo de la cabina el equipaje de mano, decisión que de prosperar podría sentar un precedente a nivel mundial. Las organizaciones de consumidores ya se manifestaron al comienzo de la semana en contra de esta decisión e instaron al Gobierno a tomar “medidas” en el asunto. La Organización de Consumidores envió una carta a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, dependiente de Fomento, para trasladarles su preocupación y disconformidad con la nueva política de equipajes de Ryanair. “Incumple la Ley de Navegación Aérea, y en concreto su artículo 97”, afirman. Según este artículo “el transportista estará obligado a transportar juntamente con los viajeros, y dentro del precio del billete, el equipaje con los límites de peso, independientemente del número de bultos, y volumen que fijen los Reglamentos”.