“Por ahora estamos simplemente ante un cúmulo de insinuaciones”, sostuvo el ministro de Justicia, Germán Garavano, en referencia a la denuncia que pesa sobre el jefe de la AFI (ex Side), Gustavo Arribas, de haber recibido coimas por parte de la constructora brasileña Odebrecht. Al ministro le bastó la explicación que el ex representante de jugadores de fútbol esgrimió a través de sus colaboradores (admitió haber recibido una sola transferencia de las cinco que se le imputan, por la venta de un inmueble en San Pablo) para restarle importancia al escándalo. “Se ha brindado una explicación”, dijo Garavano, por lo que, opinó, la denuncia pasó a ser “un tema menor”.
Garavano atendió a la prensa ayer tras reunirse con Macri en Casa Rosada. En línea con los argumentos oficiales esgrimidos ante cada nueva denuncia que cae sobre un funcionario, el ministro aseguró que “seguramente” Arribas aportará nuevos “elementos” y “explicaciones” a la justicia. “Por ahora son insinuaciones, es un tema menor”, remató.
Consultado sobre si el jefe de la AFI debería ser apartado del cargo, el ministro de Justicia aseguró que “por lo que se ha señalado, entiendo que no” y le tiró la pelota a Mauricio Macri, quien es amigo íntimo del denunciado y le alquila un piso en Avenida Libertador. “Después, según cómo evolucione la cuestión, se verá. Pero es una decisión del Presidente”, indicó Garavano. Los pedidos de renuncia provinieron en su mayoría de sectores aliados del gobierno, tal como sucedió con la denuncia por “averiguación de delito” que presentó en la justicia la diputada de Cambiemos Elisa Carrió. “Debería dejar su cargo hasta que se aclare la situación”, pidió ayer el diputado radical por Entre Ríos Alejandro Echegaray, en línea con el planteo de la legisladora porteña Graciela Ocaña.
Quien también intentó respaldar a Arribas fue el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, aunque incurrió en un fallido. Tras presentar las obras del Paseo del Bajo junto a Macri y Vidal, dijo que “en este país, somos todos inocentes hasta que no (sic) se demuestre lo contrario”, invirtiendo el principio constitucional de inocencia. “Ya se puso a disposición de la Justicia, es lo primero que hizo”, dijo después.
