El lunes fue un día de furia y verborragia para la diputada Elisa Carrió cuando ante los empresarios de la CAME aseguró que hay maniobras desestabilizadoras desde el peronismo, consideró que en 2001 el ex presidente Raúl Alfonsín fue parte de un golpe contra el gobierno de la Alianza y hasta dijo que sería heroico morir a manos de Luis D’Elía. Al presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, no le gustó esta sucesión de frases incendiarias y en un intento por bajarle el tono señaló que “extrema los ejemplos para mostrar una tendencia”.
“No va a pasar lo que dijo de los revólveres y las muertes, está extremando con un extremista, que es el caso de Luis D’Elía, que ha tenido posiciones golpistas directamente. Ella extrema su ejemplo para mostrar ese otro ejemplo”, dijo Pinedo.
Sin embargo, las frases de Carrió no dejaron de rebotar en los medios y las redes sociales: “Nosotros en helicóptero no nos vamos, los peronistas saben que digo la verdad. Además, voy a manejar pistola por si acaso para que no me metan presa. Sería divino (Luis) D’Elía matándome a mí, sería un final heroico, maravilloso. No joroben, esperen las elecciones, y no maten a los pobres. Porque ustedes ponen muertos, muchachos. A ver, yo estaba en 2001, ese fue un golpe civil, Alfonsín y Duhalde”, lanzó durante la noche del lunes.
En esa línea, la legisladora afirmó que “veo el golpismo” y se definió a sí misma como un “testigo histórico”. En su intento por respaldar a Macri, a pesar de que el fin de semana repudió el fin del programa de reducción de retenciones y respaldó en sus cargos a los vicejefes Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, Carrió atribuyó la crisis a un “golpe de mercado de la vieja corporación económica”.
Tal vez sin pensarlo dijo que le “parece bien que no hubo demasiados cambios, porque el mercado no te puede ganar y Paolo Rocca tampoco. Hubo un golpe de mercado y de la vieja corporación económica”, resaltó olvidando de que el mismísimo Macri se mostró públicamente días atrás con el empresario recorriendo las instalaciones del emprendimiento petrolero Vaca Muerta.
Parafraseando a la vicepresidente Gabriela Michetti, la diputada de la Coalición Cívica dijo que la situación actual es similar a cuando “un tren que pasa por un túnel en una mañana. Te da miedo porque solo ves oscuridad, pero después salís y ves la luz”, dijo y anunció que “vamos a vivir los seis meses más difíciles de la Argentina. Pero vamos a hacer lo necesario para que esa luz beneficie a los argentinos para siempre y se termine la Argentina del privilegio y de los golpistas”, insistió.
Ante los miembros de la CAME se jactó de su histrionismo al advertirles que “no se asusten porque nunca me pongo furiosa, simplemente soy una gran actriz de la escena nacional, como Tita Merello”, dijo para lanzar una de las peores frases: “Las crisis me generan adrenalina, me divierto en el riesgo, soy una jugadora que no tengo ganas de morir pero puedo morirme con tranquilidad”, dijo tal vez sin imaginar que esa misma noche en Chaco, su provincia natal, caería muerto por un balazo un adolescente de 13 años durante un saqueo.
Pinedo no solo tuvo que apaciguar los dichos de Carrió sino también los del ahora secretario de Cultura, Pablo Avelluto y su referencia a que el presidente Macri y el jefe de Gabinete Marcos Peña son como las caricaturas Tom y Jerry: “No entiendo bien la comparación, Tom y Jerry son una especie de dos amigos pero también andan correteando, así que no me parece exactamente feliz. El Presidente y Peña son dos amigos; Marcos tiene una mirada estratégica del cambio político en la Argentina y es un aporte muy relevante a lo que es Cambiemos y a lo que fue nuestro desarrollo político. Es un aporte muy relevante para el Presidente”, señaló.