La interna sindical por la conducción de la CGT no se detiene pero en estos tiempos de crisis generada por el Gobierno ha obligado a los diferentes sectores gremiales a acelerar las estrategias de alianzas políticas. Por caso, el grupo Lezica o como ahora se llama, Frente Sindical por el Movimiento Nacional (FSMN), se reunirá hoy con un centenar de intendentes que participan de la Federación Argentina de Municipios (FAM) que lidera Verónica Magario, quien más tarde visitará a los triunviros de la CGT. En este contexto las 62 Organizaciones, que no logra recuperarse de su última fractura, decidió alejarse del gobierno nacional y emitió un duro comunicado donde asume su desencanto con el macrismo, al que los había acercado su extinto conductor, Gerónimo “Momo” Venegas, y convocó para el paro del 25 de septiembre próximo.
El Frente Sindical que tienen como cabeza visible a Ricardo Pignanelli del Smata, Hugo Moyano de Camioneros y Pablo Biró de pilotos, tendrá su primer encuentro con la política cuando a las 10.30 se reúnan en la biblioteca de Camioneros con un centenar de intendentes. La intención de los gremialistas es sumar presencia política en su espacio que busca transformar a la CGT en un central sindical que de una vez por todas confronte con el modelo que representa el Gobierno nacional. La reunión con la FAM, que lidera Magario, se realizará antes del encuentro con el triunvirato y para los sindicalistas frentistas es una muestra del peso político y gremial que está ganando este grupo, que a partir de hoy volverá a contar con la participación de la UOM, en su pelea por la renovación de la conducción de la CGT.
El Frente Sindical está integrado por unos 70 gremios y por estos días los camioneros están trabajando en la incorporación de algunos más que, en rigor, eran gremios que se habían alejado de los Moyano cuando éstos tomaban cada vez más distancia del triunvirato e incluso del Gobierno. El martes se pudo ver una muestra de dicha reubicación sindical cuando Hugo Moyano retornó a la sede de los Aeronavegantes que conduce Juan Pablo Brey. La reconciliación es un paso previo a la participación en el Frente Sindical por el Modelo Nacional. En ese sentido, Brey se comunicó con Biró con la intención de retomar una relación que se había quebrado ante la “tibieza” de Brey ante los reclamos y protestas de los otros siete gremios aeronáuticos. Si aeronavegantes se suma sólo quedaría por fuera la Asociación de Personal Aeronáutico que lidera Edgardo Llano quien, a su vez, forma parte de la conducción de la CTA de los Trabajadores.
El FSMN tiene entre su integrantes a varios gremios que hasta principios de este año reportaban a la histórica 62 Organizaciones pero buscaron otro destino fruto de la insistencia de Ramón Ayala, el sucesor de Venegas, en mantener la estrecha relación con la Casa Rosada. Sin embargo, eso relación parece haber llegado a su fin con la publicación de un duro documento contra la “ineptitud” del Gobierno para resolver la crisis económica.
La ruptura del vínculo de las 62 con el Gobierno se produce luego de un desgajamiento interno que tuvo meses pasados cuando un grupo de sindicatos, liderados por Horacio Valdez (vidrio), se retiraran de la organización que había conducido con mano de hierro Venegas. Los gremios que se mantuvieron dentro de las 62 siguió apostando por el presidente Macri y el ahora secretario de Trabajo, Jorge Triaca. Sin embargo, la caída de la actividad económica y la imparabale inflación obligó a únicos sindicalistas macristas a terminar su vínculo y destacar “la falta de aptitud” que demostró Macri “para resolver la crisis”. Las 62 reconocen en el texto que hicieron público que habían confiado en las promesas de campaña del macrismo y ahora critican la devaluación del Ministerio de Trabajo en secretaría demuestra que “el modelo es hacernos retroceder 70 años”. No sólo criticaron la incapacidad de la Casa Rosada para enfrentar la crisis sino que abandonando su rechazo histórico al triunvirato se pronunciaron a favor del paro que convocó la CGT para el próximo 25.